Los problemas se acumulan para Ferrari. Al dudoso rendimiento de la escudería italiana en el Mundial se suma la incertidumbre sobre su plantilla. Maurizio Arrivabene ha salido a defender los rumores sobre la posible salida de Sebastian Vettel de Maranello y la posibilidad de que Eric Boullier llegase pronto para sustituirle.
El italiano ha sido tajante respecto a estas cuestiones situando el desarrollo de la formación por encima de las habladurías: "Nos centramos en trabajar, todo lo demás sólo trata de desestabilizarnos", ha sentenciado: "Cuando comprendes esto, puedes manejar la situación. Lo de los cambios en Ferrari sólo es basura, y nosotros se la dejamos a aquellos que la esparcen", afirma el jefe del equipo.
Lo cierto es que las cosas en Ferrari no marchan todo lo bien que deberían y la complicada situación llega hasta la gestión interna. La Scudería va tercera en el campeonato de constructores a 53 puntos de Red Bull que se les escapa, y en el reciente Gran Premio de Estados Unidos sus pilotos no pudieron pasar del cuarto puesto que consiguió Vettel, puesto que Kimi Raikkönen ni siquiera llegó a terminar la carrera debido a una rueda mal colocada en la parada.
Los de Maranello aseguran que están centrados sólo en el monoplaza del año que viene con el que esperan ganar lo que no han conseguido en los últimos tiempos. Así lo garantiza Arrivabene: "En las próximas carreras vamos a probar piezas nuevas mirando hacia 2017", ha explicado: "Con Mattia Binotto ha entrado un aire fresco en lo relacionado a nuestro desarrollo", ha dicho sobre el nuevo director técnico de la Scudería que llegó este verano.