Penúltima carrera para el asturiano en esta temporada 2016. En comparación con el Gran Premio del año pasado, el rendimiento del monoplaza es ligeramente superior. Aun así, el bicampeón del mundo ha sido de nuevo lo más comentado en el día de hoy tras lo protagonizado después del abandono en los Libres 2.
Aunque en un principio durante las dos sesiones de entrenamientos libres del viernes McLaren tenía pensado probar ciertos aspectos del monoplaza de 2017, incluido un cambio de volante, las altas temperaturas registradas en el trazado de Interlagos lo han dificultado: “Con el calor de hoy hemos sufrido con el agarre y la degradación y eso cambiará los próximos días que se esperan nublados y más fríos”, señalaba el español.
Dejando a un lado la temporada 2017, los 50 grados registrados en la pista han supuesto una gran degradación en los neumáticos: “Ha sido un día difícil para probar porque las gomas con estas temperaturas tienen mucha degradación y cuando haces cambios de repente vas dos segundos más lento y es difícil analizar los datos, pero intentaremos sacar alguna conclusión de hoy”, destacaba.
Tras unos Grandes Premios donde el rendimiento de los coches de Woking no ha sido el esperado, Alonso confía en ser más efectivos en Brasil: “Quizá hemos sido más competitivos que en los últimos Grande Premios y ojalá eso sea una buena noticia para mañana. La lluvia puede venir bien y con los Mercedes, Red Bull, Ferrari, Williams y Force India, los diez primeros puestos están copados y a esta altura del mundial la fiabilidad es alta para todos, así que con lluvia tendremos más opciones de entrar al Top 10”, comentaba a la conclusión de los Libres 2.
Como ya sucedió en 2015, Fernando Alonso ha sido lo más comentado del día y quizás será de lo más transcendente del fin de semana. Y es que a falta de 35 minutos para el final de la segunda sesión de entrenamientos el asturiano paraba su coche por un fallo con el ERS. Tras salir del coche el español debería de esperar hasta la bandera a cuadros para poder regresar al garaje.
Sobre el fallo del ERS, Fernando no le da mucha importancia ya que no conlleva penalización: "Había una anomalía en la telemetría y tuve que parar ya ahora debemos analizar. Estaba previsto cambiar todo porque este es un motor de viernes y el de mañana es un ERS diferente, así que no habría penalización porque usaremos el motor de Austin”, resumía.
Tras saber que tendría que esperar, Fernando Alonso se acercó a un puesto de un cámara y probó sus calidades ante el resto del mundo: "Me dijeron que iban a emitir lo que estaba grabando y el joystick es muy sensible y no pude enfocar a nada bien. Estaba buscando coches pero era como buscar un mosquito, así que debo entrenar mucho, pero espero no hacerlo este fin de semana sino en invierno que tendré más tiempo”, bromeaba.