El fin de semana que podía cambiar el rumbo de la carrera de Nico Rosberg ya ha empezado. El alemán se enfrenta a un gran premio decisivo. El domingo podría ver su sueño cumplido, pero hay que ir paso a paso. Rosberg ha quedado en las dos sesiones de libres por detrás de su compañero, aunque en la segunda se ha quedado a tan solo 79 milésimas. Su compañero, Lewis Hamilton ha sufrido un trompo durante la primera sesión, mientras que Rosberg ha protagonizado dos sesiones muy limpias.
A pesar de no haber logrado dominar ninguna de las dos sesiones, Nico Rosberg se siente positivo respecto al fin de semana: “El viernes empieza bastante bien, me gusta el set-up del coche. Con Lewis estamos muy cerca en una vuelta y para la carrera también. Tenemos un buen coche, me gusta la pista, y tengo que hacer un buen trabajo esta noche para sacar la décima que me ha faltado hoy” ha comentado el alemán.
El piloto de Mercedes el jueves comentó que no se sentía nervioso y que afrontaba este fin de semana como otro cualquiera. Sin embargo, si Rosberg consigue acabar en el podio el domingo, haga lo que haga Hamilton, él será campeón del mundo: “Me siento muy bien, es una situación muy especial. Me gustaría ver este fin de semana como un fin de semana normal, es lo mejor para mí para hacer una buena actuación”.
Rosberg cree que puede llegar a ser más rápido que su compañero y lograr la pole, algo que le facilitaría mucho las cosas de cara a la carrera, ya que las posibilidades de sufrir un accidente durante la primera vuelta disminuirían: “Tengo que hacer un trabajo un poco mejor, hoy ha estado muy cerca, pero sé que puedo hacer la pole y lo voy a intentar todo. La primera vuelta es difícil, y para la carrera el ultrablando también es difícil, porque se rompe, pues hace mucho frío. Es complicado y hay que hacer una puesta a punto especial por ello" ha finalizado el alemán.