Si bien se conocen las carreras de F1 es por celebrarse los mejores días, los días de tranquilidad y relajación: los domingos. Así ha sido siempre, pero este fin de semana por poco cambian las cosas. China es un lugar con un tiempo algo inestable en múltiples ocasiones debido a su clima tan peculiar. Es por eso por lo que los libres 1 y 2 estuvieron pasados por agua; algo positivo ya que de esta forma, los pilotos podrían probar los nuevos neumáticos de lluvia extrema e intermedios de Pirelli.
Si para el día de la carrera las condiciones fueran parecidas, lo más probable es que no se celebrase, o se pospusiera hasta que el clima lo permitiese. Esto es debido a que al ser los coches más anchos, y por tanto, las ruedas de agua al evacuar más agua, crea tal cortina de la misma que hace imposible que pilotos tengan una visión segura. Todo esto contando con que, a 250km/h y con un coche delante echando agua constantemente hacia detrás, sea realmente difícil e inseguro pilotar.
Mika Salo, encargado de asesorar a los tres oficiales en el Circuito de Shangái, ha declarado ante el periódico finlandés Tutun Sanomat, que la carrera estuvo cerca de moverse al sábado.
"La carrera estuvo cerca de moverse al sábado"
Debido a accidentes pasados, como el caso del fallecido Bianchi, en el caso más trágico y reciente, la FIA opta por primar la seguridad de los pilotos, a veces, de manera excesiva y desproporcionada, en el afán de que dichos incidentes no se repitan. Es por esto por lo que se ha contratado escolta policial para ambulancias en caso de que el helicóptero médico no pudiese despegar por las condiciones climáticas, según la revista Autosport.
La normativa de la Federación Internacional de Automovilismo indica que el trayecto entre el circuito y el hospital no puede ser superior a 20 minutos. En este caso, la distancia entre el Circuito de Shangái y el hospital más próximo es de 38 kilómetros.