Continúa la aventura del Estrasburgo

El conjunto local, gracias a una gran actuación de Da Costa, autor de un gol y una asistencia, ha conseguido imponerse a un triste Lille, que a pesar de haber recortado distancias por medio de Bissouma, no ha logrado meterse del todo en el partido en ningún momento.

Continúa la aventura del Estrasburgo
Foto: Racing de Estrasburgo
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Por Alberto González Oliver

La Copa es una competición que siempre ilusiona y con la excepción del PSG en los últimos años, es un torneo que puede ganar cualquiera como bien refleja que la hayan ganado 33 equipos distintos a lo largo de su historia, entre ellos están tanto el Racing de Estrasburgo como el Lille.  

Dos equipos que llegaban al partido en dinámicas muy distintas. Mientras los locales son décimos en Ligue 1, una posición que les permitía afrontar este partido con más tranquilidad, el Lille está luchando por salir de los puestos de descenso, factor que hacía que el Racing de Estrasburgo partiera con algo de favoritismo en estos dieciseisavos de final.

Tanteo inicial

Noche no muy fría en Estrasburgo, lo que ha beneficiado a que hubiera una buena entrada para ser un jueves a las nueve de la noche. Por parte del equipo local, de los que ganaron el pasado fin de semana al Dijon, solo repetían Seka y Goncalves. El Lille, por su parte, ha mantenido en el once a unos cuantos más de sus “teóricos” titulares.

El partido ha empezado lento, con mucho desorden y con bastantes imprecisiones en ambos conjuntos. A favor de los dos equipos hay que decir que el terreno de juego estaba muy mal, era muy complicado dar un pase o hacer un control en condiciones. Debido a esta situación, tanto unos como otros intentaban ser muy verticales y llegar al área contraria con el mínimo número de pases posibles. Tímidas ocasiones en las porterías, donde ninguna de las dos delanteras conseguía crear un cierto peligro.

Un gol y poco más

Se llevaba poco más de media hora de encuentro y el marcador no parecía que fuera a moverse, sin embargo, un centro raso de Goncalves desde la derecha, lo controlaba Da Costa en la frontal y éste conseguía meterse en el área y batir a Koffi.

Con este gol se adelantaba el Estrasburgo, pero el partido no cambiaría mucho en los quince minutos que restaban para llegar al descanso. El Lille seguía sin transmitir peligro y el único que lo intentaba de vez en cuando era el brasileño Luiz Araújo, pero sin fortuna. Casi todas las llegadas del conjunto visitante eran jugadas individuales, muy pocos pases y se evidenciaba una gran falta de cohesión entre los jugadores. 

Una segunda parte un poco más entretenida

El segundo periodo no pudo empezar mejor para el Estrasburgo ya que en el minuto 48, un centro de Da Costa lo remataría Saadi consiguiendo hacer así el 2-0. Cierto es que el guardameta del Lille podría haber hecho algo más en el gol.

Solo un minuto después, el Estrasburgo pudo haber metido el tercero y sentenciar el partido en una jugada muy parecida a la del segundo gol. El Lille estaba perdiendo muchos balones en el centro del campo y todo hacía indicar que si alguno de los dos tenía que marcar sería el Estrasburgo. Pero el fútbol tiene estas cosas y en el minuto 54, Bissouma arranca con el balón a unos 35 metros de la portería de Kamara y al llegar a la frontal, no se lo piensa dos veces y se saca un disparo potente que no pudo detener el portero galo.

Desde el 2-0 el partido estaba muy roto y el Lille, ahora que había conseguido reducir distancias, intentaba aprovecharse de esto. El árbitro estaba dejando jugar mucho, lo que beneficiaba a que el partido fuera un ida y vuelta constante. Consciente de esta situación, el técnico del Estrasburgo movería ficha y sacaría del terreno de juego a Goncalves para dar entrada a Lienard, que es un jugador menos ofensivo y así intentar controlar un poco más el partido.

Aun así, el partido seguía igual, balones largos, mucha verticalidad y muchos errores en ambos conjuntos. Hay que decir que a raíz del gol, el Lille empezó a jugar algo mejor y a ver más factible el empate. En el minuto 69, entraría Pépé, titular en liga, por Araújo, y cinco minutos después, sería Bahlouli el que dejaría su lugar a Mendes. En el Estrasburgo quien entró fue el prometedor jugador francés Martin Terrier, cuyas actuaciones han hecho que el Lyon lo haya fichado para la próxima temporada. 

Tímido arreón final

Durante los últimos quince minutos el Lille lo intentó y para proteger las subidas por banda, en el Estrasburgo se iría Bahoken para que entrara Lala, un cambio bastante defensivo ya que Pépé y El-Ghazi con espacios estaban siendo algo peligrosos. El partido continuaba igual, con pérdidas en la medular, errores garrafales. Por momentos no parecía que jugaran dos equipos de la máxima categoría del fútbol francés.

Galtier ya como última opción, dio entrada al joven Faraj quitando a Soumare, a quien se le había visto participar bastante poco en el partido. El colegiado añadió cuatro minutos de descuento, el tiempo se le acababa al Lille y ya a la desesperada en los últimos segundos del encuentro colgó una falta que le llegó a uno de los suyos en la frontal, pero su disparo fue muy manso y lo detuvo Kamara sin ningún problema.

El sueño sigue intacto

Como indicaban los pronósticos, ha sido el Estrasburgo quien ha conseguido pasar a la siguiente ronda, donde deberá visitar la cancha del Grenoble, que juega actualmente en National, tercera categoría del futbol francés. A priori, el Estrasburgo es claro favorito para alcanzar los cuartos de final, aunque ya se sabe que en la Copa puede pasar cualquier cosa. Sea como fuere, el conjunto dirigido por Thierry Laurey tiene motivos para soñar.