Siete semanas han tardado los Timbers en conseguir su primera Victoria, y esta a llegó con el mejor escenario posible, el estreno de su estadio tras las obras. En la primera mitad, los locales consiguieron en cinco minutos responder con dos goles al dominio que los visitantes estaban consiguiendo, dejando muy decantado el resultado. En la segunda mitad, a pesar de los intentos por parte de los visitantes por recortar distancias, finalmente Portland Timbers consiguió llevarse la victoria.
Minutos que cuestan puntos
El inicio fue claramente para el conjunto visitante que quiso dejar claro desde un primer momento que no llegaba como invitado a la fiesta de inauguración del estadio de Portland. De ahí que la primera ocasión de peligro legó por parte de ‘Los Loons’ y en concreto de Marc Burch, que trató de sorprender al guardameta, pero Gleeson respondió con solvencia. A pesar de ello, los visitantes continuaron apretando a su rival, aunque no lograron poner en riesgo la portería.
Conforme fue avanzando la primera mitad, la ausencia de llegadas peligrosas por parte de Minnesota fue aprovechada por los locales para comenzar a cobrar protagonismo en el encuentro y tener ellos sus posibilidades de llegar ellos a portería rival. En una de las primeras, Alvas Powell recogió el balón en banda y tras una jugada ‘maradoniana’ en la que fue dejando rivales atrás consiguió anotar el primer gol de su equipo.
Sin embargo, los locales aún consiguieron ampliar su ventaja, dejando a su rival muy tocado. De nuevo fue el lateral jamaicano que apareció por banda derecha, aunque en esta ocasión cedió su protagonismo a un compañero. Colocó un balón al área pequeña en donde Valeri se anticipó a su marcador para poner el segundo gol para los Timbers.
Con este marcador en contra, Minnesota United se vio obliga a adelantar sus líneas y a buscar protagonismo con el balón. A pesar que su rival no se dejó amedrentar, tuvo un par de ocasiones en la que pudo hacer gol, lográndolo en una de ellas. Pero el colegiado anuló la acción ya que Miguel Ibarra se encontraba situado en fuera de juego.
En los minutos finales de la primera mitad, las ocasiones llegaron por parte de ambos equipos, convirtiendo a los porteros en los protagonistas. En este intercambio de ‘golpes’ fue el conjunto de Portland Timbers el que estuvo más cerca de lograr decantar aún más el marcador a su favor. Un disparo de Blanco que golpeó en la madera, dejó a Providence Park ahogado en un ‘uy’. Con estas acciones se llegó al final de los primeros 45 minutos en donde los locales fueron los que estuvieron más acertados de cara a gol.
Quintero se estrena sin suerte
La segunda mitad comenzó con algunas modificaciones por parte de los visitantes. La iniciativa volvió a ser de nuevo para ‘Los Loons’ con Quintero y Ramirez que se entendían a la perfección en el ataque. En una de las acciones el colombiano le presentó un balón a su compañero, pero este no consiguió estar acertado de cara a portería. En estos primeros minutos los visitantes se mantuvieron firmes en defensa, tratando de aguantar las acometidas de un equipo que estaba muy cerca de conseguir marcar.
Y este gol no tardó mucho en llegar. Cuando el partido rondaba la hora de juego, apareció Darwin Quintero para dejar una clara demostración de porque Minnesota se hizo con sus servicios. Tras controlar un balón en el interior del área, superó a un rival y con un disparo cruzado, anotó un gol con un disparo cruzado.
A pesar de la presión que realizaron para conseguir igualar el marcador, fue de nuevo Portland Timbers el que logró aumentar su ventaja en el marcador con un nuevo gol. Con la defensa visitante adelantada, Paredes aprovechó un espacio entre los centrales para poner un balón a Adi. El delantero nigeriano consiguió superar al guardameta, colocando un tercer gol que hacía que la ventaja fuese casi insalvable.
Sin embargo, con casi veinte minutos por jugarse, Minnesota United FC no estaba dispuesto a tirar la toalla. Insistió sobre la portería visitante tratando de recortar distancias en el luminoso. Durante muchos minutos trató de superar una defensa local que parecía dejar muy pocas opciones que le creasen peligro. Sin embargo, a menos de diez minutos para el final del encuentro, un balón que dejaba en posición de anotar a Danladi, fue golpeado por Tuiloma para intentar despejarlo, pero la suerte hizo que se introdujese el mismo en su portería.
En los últimos minutos, los dos equipos se lanzaron descaradamente al ataque, tratando de sorprender a su rival lograr su objetivo. Las ocasiones se sucedieron, pero los delanteros fallaron más de lo que les hubiese gustado, terminando el partido con la primera victoria para los locales en la temporada.