Giménez se erige como faraón en Rusia

Un gol del central uruguayo echó al traste el esfuerzo del conjunto africano durante 89 minutos. Uruguay iguala a puntos a la anfitriona en el grupo A.

Giménez se erige como faraón en Rusia
Fuente: Federación Uruguaya de Fútbol
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Por Rafael Montes

Partido vital el que se ha disputado en Ekaterimburgo para cerrar la primera jornada del grupo A. La contundente victoria de la anfitriona Rusia ante la 'cenicienta' del grupo, Arabia Saudí, invitaba a que el duelo entre uruguayos y egipcios iba a ser decisivo para el devenir de ambas selecciones.

Buenos presagios para Egipto

La primera parte del partido fue muy igualada. Había alternativas para los dos conjuntos, aunque era Egipto el que tenía más posesión aunque sin ocasiones. En las botas de Cavani estuvo el primer acercamiento del partido, con un tiro raso del charrúa que atajó sin problemas el guardameta africano.

Egipto poco a poco encontraba huecos en la zaga celeste y Mohsen tenía alguna que otra ocasión en la que los tiros eran muy débiles de cara al marco defendido por Muslera. Uruguay no estaba cómoda durante los primeros compases del partido ya que Egipto presionaba de forma intensa en la medular a la selección sudamericana. 

Cavani era la voz cantante del ataque de la selección dirigida por Tabarez, ya que Luis Suárez no estaba teniendo el mejor día. Fue el delantero del Barça el que tuvo una ocasión de oro para adelantar a su equipo en el marcador pero erró mandando la pelota al lateral de la red.

Egipto tenía el partido donde quería, creando peligro en transiciones rápidas por bandas gracias a la velocidad de Trezeguet y de Warda, y siendo sólidos atrás en una defensa comandada por Hegazi. No echaban de menos, hasta el momento, a la estrella de la selección, Salah.

Partido muy igualado en la primera mitad donde Uruguay no estaba teniendo un buen estreno y Egipto se mantuvo muy firme y serio.

Mismo ritmo, distinto final

La selección uruguaya salió en la segunda parte con las ideas muy claras y tenía oportunidades claras para marcar de la mano de Luis Suárez y Cavani, una dupla letal. Ese inicio fulgurante comenzó a desvanecerse y Uruguay mostraba de nuevo la misma cara que en la primera mitad: desesperación, errores y desconcentración. Esto provocó que Egipto se volcara al ataque y estábamos presenciando un partido de ida y vuelta, todo se enloqueció. La doble entrada del Cebolla y Sánchez en Uruguay cambió poco en el sistema de juego de la selección celeste. 

Egipto se volvió a rearmar y a Uruguay le costaba un mundo crear ocasiones. Los africanos intentaban acercarse a la portería de Muslera con un disparo lejano de su capitán, Fatyh, que no conseguía perforar la portería. El partido empezaba a entrar en un ritmo continuo de ocasiones y Suárez, por tercera vez, no encontraba el camino del gol frente al guardameta egipcio.

Godín era el mejor de su selección y buscaba con ahínco que el encuentra se decantara en favor de los charrúas. En el tramo final, Uruguay apretaba de lo lindo en busca del gol que les pusiera en el coliderato con Rusia, pero Egipto se mantenía firme en defensa y el gol tardaba en aparecer.

Cavani tuvo un disparo de falta que se marchó al poste, cuando anteriormente una volea suya precisó la intervención extraordinaria de El Shenawy. Poco después, casi en el descuento del partido, un centro de falta lateral botado por Sánchez es cabeceado de forma impecable por Giménez, colocando el 1-0 en el marcador y asegurando los tres puntos para su país. No se lo creía la selección egipcia y mucho menos Salah, que no había disputado ni un solo minuto en el partido.

Victoria primordial de Uruguay que le permite afrontar los dos últimos partidos de la fase de grupos con garantías y sobre todo, con posibilidades reales de ser campeona de grupo. Egipto se queda tocada tras el gran esfuerzo y deberá hacer un gran papel ante Rusia y Arabia Saudí para pasar a octavos de final.