'El Teatro de los Sueños' abrió sus puertas para la celebración de uno de los partidazos de esta Premier League. Dos de los aspirantes al título de la liga inglesa se veían las caras en el encuentro que cerraba la jornada 3 y el partido no defraudó, sobre todo en la segunda mitad, donde el ritmo fue muy alto y se vieron tres goles del Tottenham y un Manchester United volcado para remontar el partido. Los autores de los goles fueron Kane y Lucas Moura por partida doble.
Ambos entrenadores alinearon un once con algunas sorpresas, especialmente el Manchester United.
La formación de Pochettino fue la habitual, con un 4-2-3-1 pero con las sorpresas de Alderweireld y Rose en defensa. El equipo fue de menos a más y Lucas Moura fue el más destacado.
Mourinho salió con Smalling, Jones y Herrera, que jugaba en una posición nueva para él y con el que el portugués buscaba tener una salida de balón más limpia, aunque el equipo acabó optando por un juego más directo y esta solución no acabó de funcionar. El centro del campo lo formaron Matic, Fred y Pogba con el francés teniendo más libertad para llegar a posiciones adelantadas, pero no consiguió aparecer demasiado.
El equipo de Mourinho mereció irse por delante al descanso, pero no lo consiguió y en los primeros minutos de la segunda parte el Tottenham consiguió una ventaja de dos goles. Tras esto, Mourinho realizó los tres cambios para que su equipo se volcase en ataque y generó peligro, pero no logró anotar y al generar más espacios, el Tottenham sentenció en un contragolpe.
Llegadas sin premio para el Manchester
El equipo de Mourinho salió bien al encuentro y a los quince segundo de partido tuvo la primera ocasión, con un disparo desde dentro de área de Fred que se marchó desviado. El dominio de la posesión era para el Manchester United y conseguían recuperar el balón rápido tras pérdida.
Las ocasiones del Manchester United se sucedieron. Lukaku tuvo una ocasión clarísima en el minuto 15 al interceptar un pase a Lloris y regatear al francés, pero el disparo del belga se fue desviado.
La primera ocasión del Tottenham llegó a los 25 minutos, en un error en la salida de balón de Matic en el que Dele Alli recuperó el cuero pero dudo entre pasar o tirar y Smalling acabó despejando.
Con el paso de los minutos, el Manchester United comenzó a jugar más directo y el Tottenham fue ganando protagonismo con la posesión, aunque esto no se tradujo en ocasiones para los spurs.
Pasada la media hora de juego, los de Mourinho tuvieron una doble ocasión, pero los dos disparos fueron bloqueados por defensores rivales.
El primer disparo a puerta del Tottenham llegó en el minuto 40, con un disparo desde fuera del área de Eriksen que atrapó sin problemas De Gea. Poco después, Dele Alli tuvo una buena ocasión pero Ander Herrera taponó su disparo.
Eficiencia de los spurs
Como en la primera parte, el Manchester United tuvo una ocasión antes de que se cumpliese el minuto 1 de segunda parte con un disparo desde fuera del área de Pogba.
El Tottenham salió mejor en esta mitad y Dele Alli pudo adelantar a los suyos en los primeros minutos con un remate a un centro raso que desvió la defensa rival a córner. En ese mismo saque de esquina, Kane remató de cabeza ajustado e hizo el 0-1 para su equipo.
La réplica de los de Mourinho no tardo en llegar, pero Lloris realizó una gran intervención al tiro cruzado del belga. En la jugada siguiente, el Tottenham aprovechó un desajuste defensivo de los locales para que Eriksen llegase a línea de fondo y pusiese un centro atrás que Lucas Moura remató de primeras para hacer el 2-0.
Después de esto Mourinho realizó los tres cambios y esto hizo que se generasen muchos más espacios y su equipo se fuese hacia arriba. El Manchester United tuvo varias ocasiones para reducir la desventaja, pero no lo consiguió y en un contragolpe, Lucas Moura aprovechó su velocidad para encarar a Smalling y plantarse solo contra De Gea, al que batió con un tiro cruzado para sentenciar el partido poniendo el 3-0 en el marcador minutos antes de llegar al 90.
Este resultado deja muy tocado al Manchester United, que se encuentra tras tres jornadas de Premier League a seis puntos de la cabeza y ocupando la decimotercera posición. Mourinho, al finalizar el encuentro, se quedó aplaudiendo a los seguidores mostrando su agradecimiento por apoyar al equipo pese al mal resultado, aunque buena parte de la afición ya había abandonado el estadio.
El Tottenham se coloca como colíder junto a Liverpool, Chelsea y Watford y confirma su buen momento de forma y la confianza de todos los integrantes del club en el proyecto.