La Confederación Africana de Fútbol, también conocida por su acrónimo CAF, fue creada en Sudán durante el tercer congreso de la FIFA citado en Lisboa en 1956. E inmediatamente, - 3 años antes que la Eurocopa- se creó la Copa África. Es considerada el tercer mejor torneo continental a nivel de selecciones y destaca por su imprevisibilidad. Egipto es la selección con más participaciones (24) y más campeonatos (7), y el camerunés Samuel Eto’o es el máximo goleador histórico de la competición con 18 tantos. Argelia es la actual campeona.

La 1ª edición tuvo lugar en Jartum, la capital de Sudán. Egipto, Etiopía, Sudáfrica y la propia Sudán iban a ser las únicas participantes. Sudáfrica fue descalificada del torneo porque proponía tener jugadores solamente de raza blanca. Egipto, que tenía el fútbol más desarrollado del continente por aquel entonces, - incluso participó en el Mundial de 1934- fue el primer campeón de la Copa África. En la siguiente edición, la Selección Egipcia fue la anfitriona del torneo y consiguió su 2º título continental. Dos años más tarde, Etiopía albergó la 3ª Copa África. Por primera vez hubo fase de clasificación para la misma en la que Túnez y Uganda fueron los ganadores, y Egipto desaprovechó la oportunidad de conseguir el tercer título consecutivo tras perder en la final contra la anfitriona Etiopía.

La década de los 60 estuvo caracterizada por la dominación ghanesa. Debutaron en la competición continental en 1963 como anfitriones, y en esa misma edición consiguieron su primer título ganándole en la final a Sudán. Y en 1965, 2º título consecutivo de Ghana. A finales de la década, el número de participantes aumentó a 8, por lo que, por primera vez, tuvo lugar una fase de grupos formada por 2 grupos de 4 equipos en cada uno. Además, tuvo lugar la primera Copa de África televisada. Fue en 1970 cuando la conquistó, por primera vez, Sudán. Fue un partido bastante polémico en el que Ghana, su rival en la final, boicoteó la ceremonia de entrega de premios como protesta de la actuación arbitral. Consecuentemente, el Coronel Nimieri (presidente de Sudán), advirtió a la expedición ghanesa que si no abandonaban el país en menos de 24 horas iban a ser tratados como delincuentes en busca y captura.

La Selección de Ghana en 1963.
La Selección de Ghana en 1963.

La siguiente década estuvo marcada por la diversidad de selecciones campeonas: Sudán (1970), Congo (1972), Zaire (1974), Marruecos (1976), Ghana (1978) y Nigeria (1980). Otro dato curioso acontecido en dicha década fue la primera participación en un Mundial de un país africano negro. La protagonista fue Zaire, actualmente llamada República Democrática del Congo. Su participación fue pésima con 3 derrotas, 14 goles en contra y ninguno a favor, pero independientemente del resultado, escribieron una página en la historia del fútbol africano.

El dominio de Camerún y Nigeria fue el principal aliciente de la década de los 80. El país que limita con Nigeria, Chad, Gabón, Congo y Guinea Ecuatorial consiguió sus dos primeros títulos en el 1984 y 1988. Nigeria, la otra dominadora de la década, fue finalista en 4 de las 5 ediciones de la década y ganó 2. La edición restante la conquistó Egipto en la tanda de penaltis contra Camerún.

Finalmente, en la década de los 90, destacó, el regreso de una de las grandes selecciones africanas, Sudáfrica. Argelia consiguió su primer y único título en la primera edición del decenio. En el 1992, el número de participantes aumentó a 12, y 4 años más tarde, a 16. Costa de Marfil ganó por primera vez en 1992. Nigeria (1994), Sudáfrica (1996), Egipto (1998) y Camerún (2000) fueron el resto de campeonas.

Salah y Mané | Fuente: LFC
Salah y Mané | Fuente: LFC

A modo de conclusión, cabe remarcar la evolución positiva del fútbol africano. Aunque siempre han habido casos aislados como el de Ben Barek en España o Eusebio en Portugal, la presencia de jugadores africanos en el fútbol europeo ha ido a más, hecho que ha captado la atención de Europa en la Copa África. Francia es el país con más jugadores del continente africano. Mohamed Salah y Sadio Mané en el Liverpool, Riyad Mahrez en el Manchester City, Hakim Ziyech en el Ajax o Kalidou Koulibaly en el Nápoles son algunas estrellas africanas que compiten actualmente en la élite del fútbol mundial.