Desde la vuelta de Ibrahimovic en el mercado invernal a Lombardía, el AC Milan ha sufrido una mejora muy notable (sin olvidarse de la figura de Stefano Pioli). Una mejora futbolística porqué mejora al resto y sobre todo anímica en clave colectiva. A sus 39 años sigue marcando goles. En el partido contra el Sassuolo jugó muy bien de espaldas a la portería y por arriba, y marcó un doblete que le sirvió al AC Milan para volver a sumar tres puntos. Suma 7 goles y 4 asistencias en 15 partidos esta temporada en Serie A
La presión bien trabajada y eficaz del AC Milan marcó el desarrollo de la primera parte porqué consiguió anular la propuesta de Roberto De Zerbi de salir jugando desde atrás: 4-4-2/4-2-4 (dependiendo de la situación) del conjunto entranenado por un recientemente renovado Stefano Pioli frente a un 4-2-3-1 del Sassuolo en fase de salida de balón. ¿De qué manera el AC Milan consiguió incomodar, y mucho, al Sassuolo con la presión arriba? Con un marcaje individual. Consigli, el portero del equipo local, salía de su área con balón para ser un tercer central con balón y ningún rival le saltaba (primera clave). Zlatan Ibrahimovic y Çalhanouglu cerca de los centrales, Saeleemakers y Rebic cerca de los laterales (segunda clave), y el doble pivote muy arriba, Bennacer y Kessié sobre Locatelli y Bourabia respectivamente, con la labor de que el doble pivote del Sassuolo no lograra girarse y preparados para la anticipación, robar y atacar rápidamente la portería (tercera y última clave)
Todos los goles llegaron en la primera mitad. Ibrahimovic abrió el marcador tras una gran presión (como la explicada arriba) en la que Kessié se anticipó y el delantero sueco remató al segundo palo un centro medido desde la derecha; Francesco Caputo marcó su gol número 19 en la presente Serie A para empatar el partido. El Sassuolo se disponía a centrar una falta lejana y en principio sin peligro teniendo en cuenta la disposición del conjunto neroverdi para el remate. En directo pareció un remate de espaldas de Caputo que se marchó fuera pero el VAR consideró que ahí había mano de Çalhanouglu. El propio Francesco Caputo convirtió el penalti. Y en el descuento, transición de libro del Milan para el 1-2: 3VS4, conducción de Çalhanouglu, esperó el movimiento para atraer rivales de Rebic y el de Ibrahimovic a la espalda de Müldür, y este último regateó a Consigli y definió a puerta vacía.
La expulsión por segunda amarilla de Bourabia en el descuento de la primera parte (45+6) condicionó mucho lo que iban a ser los siguientes 45 minutos. El AC Milan dominó con el balón (62% de posesión) y los cambios en el descanso de Roberto de Zerbi ni mejoraron nada ni mostraron una mínima posibilidad de conseguir el empate. El Sassuolo esperó y no presionó, y no logró asentarse en el último tercio del campo. Solo en el último tramo de partido se adueñó del balón. Consigli evitó con una triple parada el que hubiera sido el tercer gol del AC Milan.
Stefano Pioli invalidó la idea de Roberto De Zerbi. Además de Ibrahimovic, destacaron los siguientes nombres: Calabria, muy atento a las caídas a banda de Caputo en la primera parte y subiendo con criterio al ataque; Bennacer en la conducción y el pase en los dos campos, y también sin balón ofreciendo líneas de pase y ayudando en en defensa; Kessié, clave en la presión y promedió 7 de 7 en balones largos acertados; y Çalhanouglu, a muy buen nivel en este último tramo de la temporada en la media punta y dejando buenos detalles técnicos.
El AC Milan es quinto clasificado actualmente y su objetivo es mantenerse ahí. Desde que se reanudó la competición, el conjunto milanés todavía no ha perdido (7 victorias y 2 empates) y el próximo viernes reciben al Atalanta. Conti, Romagnoli, Theo y Bennacer no estarán disponibles para el partido.