Victoria muy importante del PSG en el duelo que le ha enfrentado esta tarde ante el Rennes en el Roazhon Park de la ciudad francesa gracias al gol de su nuevo y flamante fichaje, el alemán Draxler, que logró batir la portería de Costil en el minuto 39 de partido con un disparo desde fuera del área y que otorga a los de Emery un triunfo en un campo difícil de cara a acercarse a la primera plaza de esta Ligue 1.

Draxler se estrena como goleador en su primer partido liguero, además del tanto que marcó ante el Bastia en Copa de Francia en su estreno en competición oficial con el club parisino, por lo tanto el hábil extremo está teniendo una buena adaptación al fútbol francés y a su nuevo equipo, del que debe tirar y contribuir con su juego y con goles como el de esta tarde del sábado.

Con este triunfo, los parisinos se sitúan empatados con el Mónaco en la segunda plaza a sólo dos puntos del Niza, aunque tanto los monegascos como los de Favre tienen que jugar su partido mañana, donde los de Jardim lo tienen especialmente complicado ya que visitan Marsella para medirse a un Olympique que no ha cedido una sola derrota en su feudo y que puede ayudar al PSG a conquistar esa segunda plaza.

Cavani no consiguió mojar esta vez ante el Rennes. Foto: VAVEL
Cavani no consiguió mojar esta vez ante el Rennes. Foto: VAVEL

Draxler y nadie más

El partido comenzó con acercamientos claros por parte de los parisinos, con una ocasión para Cavani en el primer minuto que se esfumó. Draxler también tuvo una ocasión muy clara que fue sacada bajo palos, logrando intimidar por momentos al Rennes, que contestó ambas ocasiones con dos remates consecutivos de Grosicki.

El PSG no sufrió demasiado para controlar el partido ante un Rennes del que se esperaba mayor peligro, y que vio como Draxler lograba meter el primero para su equipo en el minuto 39 de un derechazo ejecutado desde fuera del área local tras un buen pase del italiano Verratti, que había recibido tarjeta amarilla previamente.

Se llegó al descanso sin más peligro que una ocasión de Matuidi que pudo sentenciar el partido antes del descanso pero el tiempo no dio para más y los de Emery se fueron con un botín importante a los vestuarios.

Draxler celebró su tanto junto a sus compañeros. Foto: Twitter UEFA Champions League
Draxler celebró su tanto junto a sus compañeros. Foto: Twitter UEFA Champions League

Sin reacción local

Tras el descanso se esperaba una reacción local que sin embargo no se apreció en el campo pese a ir por debajo en el marcador, con el PSG bien asentado en el campo, sin pasar apuros, y evitando las llegadas del equipo local. Lucas Moura pudo hacer el segundo pero su disparo no encontró mayor suerte, mientras que el Rennes por fin logró crear ocasiones en las botas de Grosicki, quizá el más activo, y de Said.

Emery decidió hacer los tres cambios en apenas siete minutos y dio entrada a Di María, a Rabiot y a Ben Arfa para tratar de dar un respiro a su equipo y buscar la sentencia de cara a no sufrir en los últimos compases del choque. El propio Di María tuvo una buena ocasión al poco tiempo de pisar el verde, pero una vez más el gol fue esquivo en una tarde de pocos tantos.

Lo cierto es que el Rennes no supo buscarle las debilidades al PSG y lo que restó de partido se dedicó a esperar un gol que nunca llegó, aunque hizo sufrir al equipo visitante hasta la última jugada, con ocasiones para Diakhaby y Said, éste último por partida doble, pero todo quedó en un susto para el equipo de Emery.