La capitanía de la selección es una de esas metas que todo jugador de fútbol desea llegar cuando empieza a dar las primeras patadas al balón. Si representar sobre el césped a tu país ya es una gran responsabilidad, liderarlo es lo máximo. Harry Kane recogió el testigo de los grandes maestros británicos y se colgó el brazalete de capitán de Inglaterra en su brazo el pasado sábado para impedir la derrota de su selección ante Escocia con un gol que significaba el empate en el minuto 93 de partido. Probablemente la mejor forma de estrenarse como capitán.
"Tenemos otros líderes en el equipo; yo simplemente tengo el brazalete"
El jugador del Tottenham ha hablado con respecto a ese asunto y se ha mostrado muy feliz por tener ese privilegio en su brazo. “Ya dije que me encantaría ser el capitán de Inglaterra, pude experimentarlo el sábado y salí a dar lo mejor de mí”, declaraba el delantero. Sabe que esto no es permanente y es muy cauteloso con respecto al tema del liderazgo ,como declaró después. “Estando en el campo no hubo muchos cambios, tenemos otros líderes en el equipo y yo simplemente tengo el brazalete en el brazo, juego de la misma forma, hablo lo mismo y grito igual”, aclaró el joven Spur.
“Es muy emocionante tener la oportunidad, Gareth (Southgate) me lo dijo en el último entrenamiento y es que ve en mí uno de los líderes del equipo, pero obviamente esto no va a ser permanente”, se sinceraba Kane ante los medios en la previa del partido frente a Francia en el que, en palabras del seleccionador, volverá a ser el capitán. “Es probablemente el momento más especial de mi carrera y no quería perder ese partido, marcar el gol del empate fue una sensación muy buena”, declaró el ariete inglés.
Kane volverá a tener otra oportunidad para lucirse en la capitanía este martes en un partido muy especial en el que se enfrenta a su compañero y capitán del Tottenham, Hugo Lloris, al que ve como “un ejemplo. Le respeto mucho, he tenido grandes compañeros capitanes y me gustaría coger un poco de cada uno”.