Con el rostro serio, sabedor de que su equipo tiene un problema con tantas derrotas en casa, Miguel Ángel Portugal atendió a los medios de comunicación toda vez que su equipo cayó ante un serio Deportivo Alavés. Una derrota que el burgalés no se esperaba, por lo que deben reponerse lo antes posible: “No me lo esperaba, tenemos que remar todos hacia la misma dirección. Hay que levantarse, quedan dos partidos antes de Navidad y hay que afrontarlos e ir a por ellos”.
El técnico blanquivioleta explicó que tras el gol de Juan Villar, el Real Valladolid perdió el control del encuentro cuando mejor estaba: “Quisimos dar un tinte de combinación, en el primer tiempo no estuvimos mal, mejor que en el segundo en el que empezamos bien. Lo hicimos todo bien en el segundo tiempo hasta el gol, presionando arriba. Después no tuvimos ese control que me hubiera gustado tener”. “Hemos conseguido el gol muy pronto, por eso parece que hemos perdido el control. Con los cambios hemos intentado recuperarlo, el Alavés es un equipo bien armado y poderoso, por eso está arriba”, prosiguió.
"Esto es ganar, ganar y ganar"
Para Portugal, uno de los mayores problemas de este Pucela es la definición: “Hemos pasado por fases, en algunas el Alavés se ha sentido superior y otras en las que hemos estado cómodos y hemos llegado. Tenemos un problema en la definición, cuando hemos superado la primera línea de presión nos ha faltado la calidad para finalizar. Hemos llegado por banda bastante bien, al final también hemos podido llegar. Pero nos falta ese remate final. Ha habido momentos de buena combinación, hace falta ese instinto matador arriba, no es fácil tenerlo en esta Segunda División”.
En cuanto a la temprana permuta de Óscar, matizó que el salmantino aún no tiene el ritmo adecuado de competición para completar todo el encuentro, al igual que Alfaro: “Cuando uno hace los cambios siempre piensa que es en beneficio del equipo, Óscar es muy referente para nosotros, Alfaro cuando coja el ritmo lo será. Pero no han tenido continuidad por las lesiones, me gustaría tenerles más en el terreno de juego”.
"No hemos definido"
“No me voy a meter en ese berenjenal, sabíamos que el Alavés tiene un fútbol correoso y de presión. El árbitro ha pitado lo que ha creído, son decisiones suyas”, respondió ante la cuestión de la actuación arbitral en este encuentro, tras lo sucedido en las últimas jornadas en las que el Real Valladolid ha visto dos expulsiones de forma consecutiva.
Por último, terminó afirmando de forma contundente que solo les queda ganar en Albacete para arreglar la derrota cosechada en Zorrilla: “Miro el siguiente partido, ganarlo. No miro nada más, ganarlo y levantarnos de esta derrota. No pienso en más que en ganar en Albacete. Esto es ganar, ganar y ganar. Las palabras se las lleva el viento”.