El Promesas no levanta cabeza

El filial albivioleta continúa en crisis después de sumar una nueva derrota, esta vez ante un muy superior Somozas. Un tanto en la primera mitad de Pablo Antas comenzó a encarrilar la victoria de los gallegos, que sentenciaron con dos nuevas dianas en el segundo tiempo. Con cuatro derrotas en los últimos cinco encuentros, los de Borja Jiménez siguen rozando el descenso.

El Promesas no levanta cabeza
Imagen de la temporada pasada. (Foto: Real Valladolid).
cesar_aldecoa
Por César Aldecoa Rodríguez

Que el cambio de entrenador en el primer equipo iba a afectar al filial pucelano era un hecho. Que lo iba a hacer tanto y de forma tan negativa, solo podía ser el peor de los presagios de la afición. La marcha de Rubén Albés al banquillo de Miguel Ángel Portugal hizo que el gallego cediera el testigo a Borja Jiménez y este, aunque sea un hombre con años en el fútbol, tiene también un grado de juventud e inexperiencia en Segunda División B, algo que está pasando mucha factura, como le sucede al resto de la plantilla. La derrota en Somozas no hace más que refrendar esta idea, en esta temporada en la que no están saliendo las cosas como deberían, como sucedió el curso pasado, y en la que el descenso comienza a ser un problema muy a tener en cuenta.

Una derrota que comenzó a cocinarse en el primer tiempo, en una primera media hora de juego de superioridad local. El premio, el tanto de Pablo Antas tras la buena jugada de Antón. La reacción del Promesas llegó en forma de clara ocasión de empate, en las botas de José. Una primera parte que apenas tuvo más ocasiones, más allá de un par de disparos del propio José, intentos que apenas inquietaron al arquero local. Tampoco inquietaron mucho los locales, que viéndose con el marcador a favor, supieron controlar el ritmo del encuentro y defenderse sin mayores problemas, esperando su oportunidad de matar el encuentro.

El Promesas ariesgó para poder empatar y se llevó una goleada

Y eso fue lo que sucedió en el segundo tiempo que tuvo como protagonista por encima del resto a Quique Cubas. Un protagonista con gol y asistencia a David Añón que completó la goleada. Una goleada que no reflejó lo que fue el encuentro, pero sí lo que es el Promesas este curso. Los de Borja Jiménez lo intentaron desde que encajaron el primero, pero se fueron exponiendo cada vez más a las contras de los gallegos que aprovecharon sus oportunidades, no como el Promesas, que volvió a marrar sus llegadas y conceder demasiado en defensa. Tan solo José, la nota más positiva de estos primeros meses de competición, supo dar la cara y, al menos, intentarlo una y otra vez.

De esta forma, el Promesas termina el año en puestos de playout, con la misma puntuación (17 puntos) que el Sporting de Gijón B, que ocupa el primer puesto de descenso directo a Tercera División. Diecisiete puntos logrados en dieciocho jornadas, o lo que es lo mismo, tan solo cuatro victorias en la primera vuelta sin el último encuentro. Números que hablan por sí solos, y que de no mejorarse, terminarían con la andadura del filial pucelano por la Segunda División B del fútbol español. Será trabajo y misión de Borja Jiménez, que solo ha logrado dos victorias en lo que lleva en el banquillo, impedir que esto suceda. El próximo encuentro será ya el 3 de enero, domingo, a las 12:00 horas en los Anexos, para cerrar la primera vuelta de competición ante el Celta de Vigo B de un viejo conocido como es Javier Torres Gómez.