Toca esta temporada en Orriols vivir la ilusión de un retorno a la máxima categoría. El Levante protagonizó un espectacular retorno a la élite el pasado año, y de cara a este, está trabajando para hacer de cuanto más especial el ascenso, mejor. Y para ello, se ha optado por empezar desde la propia esencia del club, con la piel de los jugadores, con las camisetas. Y es que de cara a esta temporada, se ha presentado un set de equipaciones cuanto menos interesante.

Por supuesto, la primera equipación, y por tanto, la local, es la clásica azulgrana. Al igual que cuando se ascendió en 2010, la camiseta del primer año en primera solo cuenta con una ralla azul en la parte frontal, con el resto de la equipación granate. Durante la estancia en la élite, por cada año que se obtenía la permanencia, se añadía una barra más al uniforme, costumbre que se perdió la misma temporada que el equipo acabó por descender. Podría retomar Macron esta costumbre, pues de momento, ha iniciado igual. Destaca el cambio en el cuello, que en esta equipación, es completamente uniforme.

Además, tras muchísimas peticiones por parte de la afición levantinista, Macron confirmó y presentó la clásica blanquinegra como la segunda equipación de la entidad emplazada en Orriols. Es ésta especial por portar los colores de uno de los dos equipos que en 1939 se fusionaron para dar a luz al Levante UD, el Levante FC; mientras que los colores azulgranas pertenecían al otro, el Gimnástico. Hay que añadir una tercera equipación, completamente rosa, con detalles en la camiseta a modo de franjas oblicuas de un tono algo más oscuro que el de la base. Ésta, nace con la colaboración de la entidad levantinista con la AECC, y los beneficios obtenidos en sus ventas, se destinarán a dicha entidad.

Para acabar, hay que prestar especial atención a la cuarta y última camiseta para los jugadores de campo. Es la misma "Senyera" que el año pasado vistieron en unos pocos partidos los granotas. Seguramente, se reservará su uso para las jornadas correspondientes a las semanas que incluyan el 9 de octubre, día de la comunidad, y San José, dos de los días más emblemáticos para la comunidad valenciana. La equipación del primer guardameta se ha sustituido por un tono más amarillento que el verde del año pasado, mientras que Oier conserva su uniforme completamente negro.