Una maravilla de Ganso decidió la contienda para el Sevilla FC en el Coliseum Alfonso Pérez. No obstante, la imagen del equipo de Berizzo no fue la mejor y distó mucho de la que se espera día a día en un conjunto de tanto nivel. La noticia positiva es que se sumaron tres puntos más, que los rojiblancos aún no saben lo que es perder en competición oficial, y que, sobre todo, queda mucho tiempo por delante a un Sevilla que, todo sea dicho, está cumpliendo en cuanto a resultados (cuatro de seis en Liga y clasificación para la fase de grupos de la Champions League).
La principal clave del triunfo estuvo en la portería sevillista. Sergio Rico volvió a brillar, destruyendo una y otra vez las posibilidades azulonas con sus intervenciones. Los delanteros locales a buen seguro tuvieron pesadillas con el canterano esta pasada noche, en especial Jorge Molina, que tuvo el 1-0 en el primer tiempo con un disparo raso y ajustado al palo derecho que el "1" visitante le sacaba con una manopla incontestable. También en la segunda parte el de Alcoy tuvo una gran ocasión al quedar solo ante el portero, que tapaba con su cuerpo todo el ángulo de disparo del ex del Betis. En definitiva, Rico volvió a ofrecer la gran seguridad bajo los palos que tanto demandaba su equipo.
Kjaer, el líder que necesita la defensa rojiblanca
En la zaga, el más destacado fue el danés Simon Kjaer, especialmente insuperable en los balones aéreos. Le costó adaptarse pero poco a poco parece convertirse en lo que estaba llamado a ser, el auténtico líder de la defensa. Sergio Escudero también estuvo en su línea, teniendo mucha presencia en las dos canchas, mientras que Mercado se defendió en el puesto de lateral derecho. Nico Pareja fue el otro central titular, pero no le aguantó el físico y fue reemplazado por Lenglet en el descanso.
El centro del campo, ante las ausencias de N´Zonzi y Banega, estuvo comandado por Guido Pizarro, que en gran medida palió el hueco del primero. Ordenó, dio sentido y movió a su antojo. Otro tema fue el del rosarino, ya que ni Krohn-Dehli ni Ganso dieron el brillo que da el ex del Inter. El carioca no destacó, pero su calidad fue el factor diferencial y con su majestuoso gesto para rematar el centro de Mercado dio los tres puntos a los de Nervión.
Por último, en ataque volvió a dar la cara como nadie Jesús Navas, a pesar de que el nivel general de juego no le permitió hacer grandes cosas. Por el otro lado, Nolito puso mucha voluntad pero le faltó acierto, al igual que a Ben Yedder en la punta del ataque. El sustituto del francés, Muriel, volvió a quedarse sin marcar, a pesar de tener incluso una muy clara en un mano a mano que le ganó Guaita.