La Selección Española sub-18 ha conseguido meterse en la final del Torneo Internacional que está disputando durante estos días en Eslovaquia. Lo hizo con emoción, pues perdió el último partido de la fase de grupos, aunque los resultados conseguidos en los encuentros anteriores del grupo permitieron a la selección ganarse el pase a esa final que disputará este viernes ante Inglaterra.
Esa derrota, que al final no tuvo importancia, llegó el jueves ante República Checa. El seleccionador español alineó un equipo con muchas caras nuevas respecto a los que habían disputado el partido anterior. Los checos hicieron notar su gran fortaleza física con una presión alta y un juego aéreo que causaba estragos en la defensa española. Así llegó el primer gol a la media hora de juego tras un tanto de Filip Firbacher. Poco después del descanso, llegaba el segundo gol anotado por Nicolas Penner. Esto supuso un duro revés del que España no pudo levantarse a pesar de que logró recortar distancias gracias a un tanto de César Moreno.
Esta derrota no supuso nada a efectos clasificatorios porque la selección nacional venía de buenos resultados en este torneo. Anteriormente, los de Santi Denia venían de vencer por 2-1 ante los anfitriones de este campeonato. Un partido muy igualado en el que España comenzó ganando gracias a un tanto de Nils Mortimer, que vio como le empataban poco después. Finalmente, conseguiría la victoria con un gol de Marc Tenas en la segunda parte.
El debut en este torneo fue, hasta el momento, el gran partido de la selección que ganó por 0-2 a Croacia. Ambos goles llegaron en la primera mitad y antes de la media hora ya vencía con comodidad. A partir de ahí, los croatas no pudieron hacer nada para reponerse y los de y el conjunto español pudo incluso hacer algún gol más.
Tras esta fase de grupos con buenas sensaciones, la Selección Española se enfrentará en la final a Inglaterra, una de las selecciones que mejor cantera ha demostrado tener en los últimos torneos de categorías inferiores.