El Camp Nou lo ha vuelto a demostrar. Como rezan las letras del himno que compuso Manuel Valls para rendir culto al FC Barcelona y que resuenan noche tras noche en el anfiteatro culé, "tot el camp, és un clam". Este verso resume la unión innegociable que noche tras noche se genera entre afición y jugadores, y que hace del epicentro futbolístico de la ciudad condal uno de los lugares más mágicos del planeta fútbol. Y es que esta sintonía, que se hace visible desde los prolegómenos de cada choque, ha hecho del equipo azulgrana una máquina imparable cuando viste ante su afición y lo hace en la máxima competición del fútbol europeo. 33 son los partidos que acumula el Camp Nou sin conocer la derrota en la UEFA Champions League, una cifra que se resume en seis años de imbatibilidad local en su andadura por Europa para el conjunto culé.
Ha habido dudas, como las de este miércoles ante el Inter de Milán, que cerca han estado de privar al Barça de lograr algo positivo, e incluso se han producido eliminaciones, tras haber caído en la ida, como ante la Juventus hace dos años. Pero lo cierto es que el Camp Nou es un auténtico fortín, del que sólo ha podido salir victorioso el poderoso Bayern de Munich de Jupp Heynckes seis años atrás, en una auténtica exhibición que borraba al Barcelona del mapa europeo con Tito Vilanova a sus órdenes. Desde aquella noche de 2013, en la que se esculpió un demoledor 0 a 3 en el marcador del estadio, nadie que ha visitado el Camp Nou ha logrado llevarse la victoria. Una cifra, la de 33 partidos invictos, de la que sólo presumía el Real Madrid, rey de Europa, hasta la fecha, y que este martes lograba apuntarse el Barça de Ernesto Valverde en su libro de hitos.
La confianza que generan las gradas del Camp Nou, se hace plausible también en los resultados logrados por la armada culé, que brinda a los suyos auténticas exhibiciones futbolísticas. Las goleadas ante el PSG por 6 goles a 1, en la mítica remontada, o ante el Liverpool por 3 goles a 0, forman parte del estratosférico balance barcelonista de 101 goles a favor y 16 en contra, logrados en 30 victorias y tan sólo tres empates blaugranas.