Desde la conquista de la Décimotercera en Kiev frente al Liverpool en junio de 2018, al club presidido por Florentino Pérez se le ha atragantado una ronda, los octavos de final, que evoca a recuerdos de la primera década del Siglo XXI, donde caía una y otra vez fuese el rival que fuese. Los traspiés ante Ajax y Manchester City, el primero de manera inexplicable tras el resultado de la ida, el segundo más justificado, han supuesto una pequeña pérdida de status europeo para el equipo con más 'Orejonas' de la historia, que este año quieren recuperar superando el obstáculo del Atalanta.
Una Atalanta venida a menos
El hecho de acabar como primeros, a pesar de bordear la eliminación a lo largo de la fase de grupos, hizo que el Madrid pudiera esquivar a los gallitos del panorama europeo, como son el Bayern, Liverpool, el City, la Juve o el PSG. Los cuatro posibles contendientes quedaban reducidos a la Lazio, Leipzig, Oporto y la Atalanta, siendo finalmente la Dea con quien se bata para conseguir una plaza en los cuartos de final.
El conjunto italiano se estrenó en Liga de Campeones la pasada temporada, siendo una de las revelaciones. Consolidada en Italia entre las primeras posiciones desde 2017, su puesta en largo en la máxima competición continental fue todo un éxito, pasando la fase de grupos, con apuros eso sí, eliminando al Valencia en octavos y cayendo ante el PSG en los minutos finales.
A pesar de llamar la atención por su juego alegre, su potencia en ataque, que son sus dos principales virtudes, ha conservado la mayoría del grupo, incluido el maestro de esta orquesta que tan bien suena, Gian Piero Gasperini. Desde su llegada a Bérgamo, cambió la filosofía de juego, estableciendo un sistema en las antípodas del clásico catenaccio italiano, volcado en la superioridad en los metros finales, con mucha llegada y con una potencia goleadora que no tiene nada que envidiar a los grandes de Europa, particularizada en nombres como Muriel, Zapata, Ilicic o el 'Papu' Gómez, estandarte del equipo.
Sin embargo, el Atalanta que se pueda encontrar el Madrid puede distar de lo ofrecido hasta ahora por los nerazzurri. Para empezar, hay un divorcio que parece irrenconciliable entre Gasperini y el 'Papu', que puede dar con el argentino muy lejos de Italia en este mercado invernal. Una discusión por el nuevo emplazamiento táctico de Gómez ha desatado un problema que ya es evidente, muestra de ello es su suplencia en el partido del pasado fin de semana ante la Fiorentina.
Aparte de este problema, el equipo no carbura como el año pasado, siendo octavo de la Serie A a diez puntos (con un partido menos) del liderato ostentado por el Milán, y habiendo tenido que esperar hasta la última jornada en Ámsterdam para certificar su pase a las rondas eliminatorias de la Champions. A pesar de ello, los blancos no se pueden despistar si no quieren sufrir un nuevo revés, ya que el Atalanta ha vencido en Anfield esta temporada, una hazaña visto el nivel del Liverpool.
Resto de cruces
En lo que se refiere a las otras siete eliminatorias disputadas, destaca el Barcelona-PSG con el morbo de ver a Neymar enfrentarse a su ex equipo con el que mantiene una relación de amor-odio desde su salida y con el recuerdo de la famosa eliminatoria de 2017 con la remontada en el Camp Nou. Atlético y Sevilla tuvieron algo de mejor suerte dentro de la complejidad de sus posibles rivales, al cruzarse a Chelsea y Borussia Dortmund, respectivamente.
Los cuatro encuentros que no involucran a equipos españoles serán un interesante RB Lepizig-Liverpool, Borussia M.-Manchester City, Porto-Juventus y Lazio-Bayern. Las fechas de las eliminatorias serán entre el 16-17 y 23-24 de febrero la ida, dejando la vuelta para marzo entre el 9-10 y el 16-17.