Comienza el Tourmalet de la UD Las Palmas

El ascenso a la Col du Tourmalet es uno de los momentos más esperados por los aficionados al ciclismo. El mítico puerto de montaña del Tour de Francia es bien conocido por tener una de las etapas más complicadas de la ronda gala y del ciclismo profesional en general. Un viaje que en cuanto a paisajes y entorno es inigualable, pero que hay que sudar la gota gorda para coronarla. Eso es lo que le espera a la UD Las Palmas en el Norte. Auténtico fútbol, rivales correosos y estadios históricos. Pero, por encima de todo, encuentros donde hay que bajarse al barro y ponerse el mono de trabajo para sacar los partidos adelante.

Históricamente y, sobre todo en los últimos años, la UD ha sido un equipo con una tónica constante. Uno de los mejores locales de la categoría pero que se le apagan las luces cuando viaja lejos de la isla. Esta realidad se acentúa cuando el destino del avión es el norte peninsular. Los partidos más desastrosos y las derrotas más dolorosas casi siempre han ocurrido en esta zona y no es producto de la casualidad.

El fútbol que propone la UD, de ser protagonista con el balón y tener un buen trato con el esférico, choca directamente con la propuesta que tienen los equipos del Norte. Un juego mucho más físico y correoso. Más dinamismo en ataque y seguridad atrás, donde cada balón se lucha como si fuera el último. En esta clase de escenarios, la posesión y el 'jogo bonito' no suele acabar bien.

Este particular ascenso del Tourmalet amarillo comenzó dos jornadas atrás en Vitoria y ya se demostró que los pupilos de García Pimienta van a tener que sudar tinta para llevarse los tres puntos en esta clase de escenarios. En Mendizorrotza, Las Palmas monopolizó la posesión del esférico (77%), pero al primer error, el Deportivo Alavés castigó e hizo que la UD encajara su primer (y hasta la fecha el único) gol de la temporada. El cuadro canario consiguió empatar y volvió a someter al conjunto vasco, pero apenas consiguió inquietar la portería rival. De hecho fue Álvaro Valles el que evitó con una intervención decisiva que los tres puntos se quedaran en casa.

Pese a que en líneas generales se puede decir que el empate entre Deportivo Alavés y UD Las Palmas fue justo, dicho encuentro fue una clara advertencia para los amarillos. Las visitas al Norte serán bastante parecidas a lo que se vio en Vitoria y ahora arranca el verdadero ascenso. Las próximos partidos del equipo a domicilio van a ser a esta zona y van a poner a prueba el liderato que comparten los canarios precisamente con los vitorianos. Empezando por Santander, la UD tendrá que visitar en las próximas semanas Miranda del Ebro, Lugo, Ponferrada y Huesca. Tras ello, habrá un pequeño receso por tierras valencianas (Levante) y se completará el ascenso con dos partidos en Asturias en cuestión de cuatro días (Real Oviedo y Real Sporting de Gijón).

Los problemas que arrastra históricamente la UD con el fútbol norteño se pueden comprobar si se analiza el Tourmalet amarillo de la pasada temporada. Tres de los peores partidos de la temporada llegaron en Miranda del Ebro, Lugo y Zaragoza; rivales como el Burgos, Huesca y Amorebieta se atragantaron; se dejaron buenas sensaciones en Eibar y Oviedo pero no se pudo conseguir el triunfo; mientras que las únicas victorias llegaron en San Sebastián con Pepe Mel y la racha triunfal de García Pimienta comenzó en Valladolid seguido del milagro de Ponferrada y la última jornada contra un Sporting que no se jugaba nada.

Visitas al Norte de la UD la pasada temporada

El excelente final de temporada de la UD, que se inició precisamente en la visita a Valladolid, logró maquillar un Tourmalet que hasta la llegada de García Pimienta había sido cuanto menos desastroso. El balance general fue de 4 victorias, 5 empates y 3 derrotas. 17 puntos de 36 posibles puede ser positivo teniendo en cuenta los resultados de temporadas anteriores. Pero ahora la situación ha cambiado por completo. La temporada pasada la UD inició su racha de invictos cuando parecía una utopía llegar a los play off y todo hacía indicar que la temporada estaba terminada. Ahora, los amarillos han comenzado el curso siendo líderes y quieren reafirmar su candidatura a estar en los puestos de arriba a final de la campaña.

Lo que manda es la actualidad y el próximo partido que tiene la UD ante sí es en Santander. Un campo que históricamente le he dado bastante mal a los amarillos (solo 4 victorias en 20 visitas), aunque lo cierto es que los últimos partidos en el Campos de Sport de El Sardinero se han saldado de manera positiva (dos triunfos y un empate en las últimas tres citas). El cuadro cántabro había empezado la temporada como el peor conjunto de la categoría. Contaba todos sus partidos por derrotas y no había sido capaz de anotar un solo gol.

Todo eso importa muy poco porque en la última jornada el Racing estrenó su casillero de puntos de la mejor manera posible. Victoria de prestigio (0-2) en una de las plazas más complicadas de Segunda como es El Molinón y ante todo un candidato a estar arriba como es el Real Sporting. Clara advertencia a los amarillos, que aunque sean líderes y su próximo rival ocupe puestos de descenso, van a tener que trabajarse el partido al máximo si quieren llevarse los tres puntos de tierras cántabras.

Sea como fuere, la UD, desde la llegada de García Pimienta, ha demostrado que puede ser competitiva tanto dentro como fuera de la isla. De hecho, sus mejores partidos con el catalán en el banquillo han llegado en tierras peninsulares. El ascenso al Tourmalet ya ha comenzado. Si se supera, el conjunto canario habrá dado un paso de gigante para cumplir sus objetivos de intentar asaltar el ascenso.