Sarabia quería ganarse un hueco en el once titular, hueco que no se ganó con Eduardo Berizzo. Para el argentino, él era su gran revulsivo. Normalmente partía desde el banquillo para darle ese impacto al partido cuando más lo necesitaba. Aportaba ese plus de empuje que tanto le caracteriza al madrileño, además de sus grandes centros al área para meter a los rivales atrás.

Sin embargo, el centrocampista no se conformaba solo con eso, pues aspiraba a formar parte del plantel inicial. Se veía con confianza, y en verdad estaba siendo el jugador que más aportaba al equipo.

La llegada de Vicenzo Montella le podía abrir las puertas a la titularidad. Pero en los dos primeros partidos del italiano en el banquillo, el de Boadilla volvía a partir desde el banco. Primero ante el Cádiz en Copa y después en la debacle en el Sánchez Pizjuán contra el Betis. A partir de ahí, el estratega transalpino le dio confianza al madrileño, y este ha respondido con creces.

Sarabia aumenta su influencia con el italiano

Sarabia marchándose de Lucas en el partido de Copa / Sevilla FC
Sarabia marchándose de Lucas en el partido de Copa / Sevilla FC

Sarabia ha visto cómo el técnico italiano contaba con él en el partido de vuelta de la Copa ante los gaditanos. Los hispalenses ganaron por 2-1. Sin embargo, volvió a prescindir del madrileño contra el Alavés y su equipo volvía a recibir un marcador adverso. Por lo que Montella confió en él para el partido de los cuartos del torneo del “KO” ante el Atlético y éste respondía con un excelente trabajo. Pero su culmen llegaría en el partido de Liga contra el Espanyol, donde con un excelente disparo mandó el esférico a la escuadra de la portería defendida por Diego López.

El de Boadilla se ha ganado la titularidad a base de trabajo y lo ha culminado con un excelso partido ante los pericos. Por tanto, resulta difícil que el técnico italiano quiera prescindir de Sarabia para el partido ante el Getafe, pues resultaría osado prescindir de un jugador en un estado de forma tan excelso.

Además, el madrileño se enfrentará a su ex equipo, por lo que será un partido muy especial donde querrá demostrar que ya no queda nada de aquel chaval al que dieron la posibilidad de jugar en Primera, puesto que se ha hecho todo un hombre y está comandando un Sevilla que parecía no encontrar solución a sus problemas. Y parece que los han encontrado dándole galones al de Boadilla. Por lo que los hispalenses se encomiendan a Sarabia para sacar un buen resultado ante un Getafe que no se arruga ante nadie.