El partido del sábado (18:00 horas) en el Coliseum será especial para el Levante. Lo primero, porque es duelo de parte alta de la clasificación y lo segundo, porque si el Levante UD vence, estará a dos triunfos de alcanzar el ascenso de forma matemática.

En Valencia se lleva planeando varias semanas cuándo y cómo será la fecha que todo levantinista desea: ese retorno a la máxima categoría del fútbol español. Si bien, algo se tenía claro: si el Levante UD vencía al Mirandés (ya lo hizo 2-1), al Getafe, al Reus y al Cádiz sería matemático. Con lo que el partido de este fin de semana será decisivo para decidir el porvenir a corto plazo del conjunto de Orriols, que quiere cerrar en cuanto antes la liga y centrarse ya de pleno en la próxima campaña.

Sobre el partido, que enfrentará al líder contra el sexto clasificado en su estadio ha advertido Muñiz. El técnico tiene claro que el Getafe es un equipo que puede hacer daño. Ya puso las cosas difíciles en el Ciutat siendo uno de los únicos dos equipos que ha conseguido sumar un punto en Valencia. “El Getafe siempre compite y esos les hace peligrosos hasta que el árbitro pita el final. Vamos a jugar contra un equipo con muy buenas individualidades. En campo contrario sabe resolver situaciones y domina muy bien el área contraria. Hay que estar muy atentos” ha destacado en un primer momento.

Muñiz, sabe además, que el conjunto madrileño es un proyecto hecho con la misma aspiración que el conjunto que dirige. “Tiene jugadores de Primera que son muy resolutivos”. No obstante, el momento que atraviesa el conjunto azulón no es idílico. Están a una sola derrota de poder quedarse fuera de los puestos de Play-Off. “Tiene buena estrategia, juego aéreo, tienen calidad y son muy correosos. Pueden decantar un partido en un minuto y tienen mucho poderío. Necesitaremos mucho trabajo y mucha pelea”.

No obstante, el técnico ha destacado que “motivación debemos tener mucha”; más aún teniendo en cuenta los más de 400 aficionados que se espera, se desplacen a Getafe para presenciar el partido y animar a los granota.

“Es una responsabilidad más, como la de todos los domingos, saber que se molestan en viajar contigo y hacer todos esos kilómetros y al día siguiente trabajar. Intentaremos no defraudarles, con humildad desde el primer día hasta el último”, ha concluido.