El Levante de Muñiz se enfrenta en esta jornada a la Real Sociedad en Anoeta, y lo hará posiblemente sin Jefferson Lerma. El jugador colombiano acortó plazos en su lesión pero el cuerpo técnico del Levante prefiere no arriesgar porque se trata de un jugador bastante importante para Muñiz. Después de tener que retirarse del campo en el partido de hace dos semanas frente al Real Madrid, se le diagnosticó una microrotura fibrilar con unos 21 días de baja casi seguros. La evolución del centrocampista ha sido sorprendente, su intención sería poder disfrutar de minutos este fin de semana, pero la idea de Muñiz es diferente a la del jugador.

Lerma ya nos tiene acostumbrado a recortar plazos en sus diferentes lesiones. Este año lo vimos lesionarse frente al Valencia en la primera vuelta, y también a la vuelta de un compromiso de selecciones. En estas dos ocasiones el joven jugador se recuperó con antelación a lo esperado, y sin ninguna recaída. La situación ha vuelto otra vez más al despacho de Muñiz, y la decisión está casi tomada al 100%, Lerma no jugará en Anoeta para prevenir una recaída que le deje fuera en el tramo final de la temporada.

Sin Lerma, Muñiz tiene a su disposición muchas opciones para confeccionar su alineación, desde seguir la misma estrategia que el pasado Domingo en Mestalla, con Lukic, Campaña y Doukouré, hasta cambiar a alguno de ellos por Pier, que es más defensivo; o por Bardhi, que aportaría una mayor verticalidad al equipo.

Una de las opciones, que no se puede descartar, es el cambio de sistema, y jugar con dos puntas. Esta técnica no sería la primera vez que la utilizaría Muñiz, en los dos últimos partidos, los minutos finales se han disputado con este sistema más ofensivo de lo común.