Sin tratarse de un juego de escapismo, que podría serlo dado el fascinante oficio del malagueño, Isco Alarcón ha vuelto a esfumarse de las alineaciones del conjunto blanco. Así lo confirman sus ausencias en el último partido del 2017 contra el Barcelona y recientemente frente al Deportivo.

En lo que respecta a la Liga, el centrocampista está perdiendo su hueco, al igual que en Copa del Rey, donde sus minutos no llegan a 70 desde que se estrenase en octavos. Le ha tocado disputar los denominados minutos de la basura en dicha competición, pero lo preocupante está cada fin de semana. 

Con la 'BBC', vuelta al pasado sin que importe nada más

Para Zinedine Zidane "todos son importantes" pero unos son indiscutibles si están en plena forma mientras que el resto debe ganarse el pan en cada entrenamiento. Ahora, según los últimos duelos ligueros, el papel de jugador que nunca se rinde, se esfuerza al máximo y pelea por ser titular le llega a Isco, con una historia que ya le suena bastante. 

Esa que tiene escrito el imperativo categórico de que jueguen Bale, Benzema y Cristiano sobre todos los demás. Da igual que esos otros vengan de un sensacional recorrido, estado de forma o méritos ganados partido tras partido, actuación memorable tras mágicos momentos regalados al aficionado. Que el mago andaluz estaba siendo el más destacado lo dicen sus asistencias y goles: ocho en total. 

Los números de Isco invitan al optimismo y a su titularidad

Traducido a resultados, con su doblete se ganó al Espanyol, se inició el buen camino en Montilivi y también en Las Palmas. Con su maravillosa asistencia a Ronaldo, el equipo madridista derrotó al Getafe en un complicado estadio. Además, contribuyó con otros pases de gol a los triunfos de Anoeta y contra el Eibar en casa. El jugador blanco más importante de la primera vuelta liguera fue Isco.

Isco frente a los futbolistas del Espanyol en el Bernabéu I Foto: Daniel Nieto (VAVEL)
Isco frente a los futbolistas del Espanyol en el Bernabéu I Foto: Daniel Nieto (VAVEL)

En sus plenas facultades -pues jugó con molestias la jornada 2 y 3- Isco no pudo hacer más en los tres empates ligueros posteriores. Su posición de mediapunta le ayuda mucho a desprender todo el talento que tiene, pero se ve demasiado solo cuando sus compañeros se ofrecen o mueven menos. 

Quizás sea por ahí que Zidane haya decidido prescindir de él, a favor de la velocidad y potencia de Bale, por ejemplo. No obstante, el Real Madrid pierde mucho juego sin el malagueño en el verde, motivo suficiente para que se piense dos veces su decisión. En el clásico de diciembre se notó muchísimo.

Las variantes pasan por alinear a varios magos juntos (como hace Lopetegui en 'La Roja') o apostar exclusivamente por una táctica más voraz, utilizando para ello a futbolistas para correr, dar cuatro pases y fusilar porterías. Por el momento, contra el Deportivo funcionó la segunda opción. ¿Qué sucederá en Copa del Rey o el próximo duelo de Liga?