El Racing volvía a disputar un partido tras el fiasco que supuso no lograr el ascenso la pasada campaña y con la incertidumbre generada en torno a una afición que sólo ha visto cómo los jugadores más determinantes del pasado curso abandonaban el club. Con estos antecedentes, el equipo santanderino se presentaba en el campo de Urritxe para enfrentarse a la Sociedad Deportiva Amorebieta. Y el resultado ha sido bastante positivo, ya que ante la ausencia de fichajes y de caras nuevas, el técnico racinguista ha dispuesto de dos equipos muy variados y con amplia presencia de jugadores canteranos.

El primer once de Ángel Viadero presentaba la base del pasado año, con la incorporación de uno de los dos fichajes, Gonzalo de la Fuente, los canteranos Goñi y Puras y la incorporación en ataque de Matías Aquino, hermano del jugador franquicia y máximo goleador racinguista la pasada campaña.

Héber Pena fue uno de los jugadores más destacados

Ya desde los primeros minutos, se vio a un Racing un poco más enchufado que su rival, con más velocidad y creando peligro por las bandas. Al poco de comenzar, los cántabros ya dispusieron de la primera ocasión, tras rematar con poca fortuna Óscar un centro desde la izquierda de Héber Pena. Ese ímpetu que mostró el cuadro racinguista durante los primeros minutos de partido, se vio recompensado con la culminación por parte de Dani Aquino de una gran jugada, rematando desde fuera del área con un potente disparo con su pierna izquierda. Primer gol del ariete del Racing con el que celebraba su renovación hasta el año 2020. 

Ese gol del murciano no hizo decaer el buen arranque del Racing, y el equipo siguió mostrando mucha más intensidad que su rival, que apenas inquietaba la portería de Iván Crespo. Las llegadas al área del Amorebieta se sucedían y Óscar, Héber y Puras intentaron sin éxito anotar el segundo gol santanderino.

Sin embargo, fue el otro Aquino, Matías, quien no desaprovechó una de sus primeras ocasiones y tan sólo tuvo que empujar una gran asistencia de Óscar, tras una excelente combinación del conjunto racinguista. Era el minuto 25 de partido y el Racing imponía su mejor juego que continuaría en los siguientes minutos y que vieron como otra vez, Matías Aquino, transformaba desde los 11 metros un penalti señalado tras una excepcional jugada de Héber Pena por la banda izquierda. Con ese resultado se llegaba al descanso y con la sensación de superioridad absoluta del equipo santanderino.

Cambios tras la reanudación

La segunda mitad tanto Ángel Viadero como el técnico del Amorebieta, Joseba Etxeberria, cambiaban por completo sus equipos iniciales. El entrenador racinguista combinó a jugadores más veteranos como Julen, César Díaz o Quique Rivero, con otros canteranos como Darío, Ares, Mario o Pau. Los primeros minutos fueron de tanteo entre los dos equipos, en los que apenas hay que reseñar un disparo de Quique Rivero que a punto estuvo de incrementar el marcador cántabro. Sin embargo, fue el Amorebieta el que redujo distancias en el minuto 53, tras anotar Jon Ander un penalti cometido por la zaga racinguista.

El ritmo del partido decayó y las alternativas se sucedieron, sin grandes oportunidades en ninguna de las dos áreas. En este período, lo más reseñable fue una clara ocasión del equipo local que salió rozando el poste y tres llegadas racinguistas, una de Gonzalo Peña y otras de Mario Soberón y Pau que cruzó en exceso el balón.

Quique Rivero mantiene el balón ante dos rivales

En definitiva, buen comienzo del Racing que cimentó su victoria en una primera parte que aportó velocidad e intensidad y en la que fueron muy superiores al Amorebieta. Ya en la segunda mitad, las fuerzas entre ambos equipos se equilibraron y las ocasiones brillaron por su ausencia.  El próximo partido del cuadro racinguista será el próximo sábado 29 de julio en el estadio de Lasesarre ante el Barakaldo CF.