El final del partido entre Athletic y Sevilla de este sábado no ha sido un fiel reflejo de lo que ha sido el encuentro en su conjunto. Un equipo andaluz desarbolado y desquiciado por la expulsión de Sirigu y con la circunstancia puntual de Iborra bajo palos. El capitán sevillista no pudo detener el penalti de Aduriz aunque no mostró malas maneras como portero.
"Cuando hemos conseguido empatar nos hemos venido un poco abajo"
Tras consumarse la derrota, ante los micrófonos en la zona mixta de San Mamés Vicente Iborra analizó el encuentro mostrándose enfadado por no poder vencer, una vez más, lejos del Sánchez Pizjuán: “Hay que ser realistas, queríamos ganar ya fuera de casa y no ha podido ser así, otra vez. Hemos tenido el balón, la iniciativa, se ha puesto el partido cuesta arriba con su gol y cuando hemos conseguido empatar nos hemos venido un poco abajo. Desde el principio se ha visto intención de ir a por ellos con y sin balón, intentando meterlos en su campo pero ellos han sido más efectivos en cuanto a detalles y momentos clave”.
Un portero de circunstancias
La expulsión de Sirigu llevó al valenciano a ponerse los guantes y defender los palos del Sevilla durante aproximadamente cinco minutos, Iborra mostró con sus palabras su compromiso con los de Nervión: “Jugaré de lo que el equipo me necesite, por delante o por detrás. Lo de hoy ha sido un momento complicado por la circunstancia que se ha producido. Ahora tenemos una final en casa en Champions. Tenemos que levantarnos ya y trabajar para ello”.
El Sevilla luchará por sumar su primer triunfo en Liga de Campeones el próximo martes ante el Lyon francés. Los andaluces consiguieron un valioso punto en la primera jornada en su visita a la Juventus y aumentó así sus posibilidades de hacerse con un puesto en octavos.