Una noche que pintaba ser terrorífica para el Sevilla FC, terminó siendo épica e inolvidable. El coraje del equipo en la segunda mitad permitió levantar un marcador adverso de tres goles, y levantó a una afición que supo corresponder y reconocer el esfuerzo de sus jugadores. La fantástica reacción tras el intermedio con dos goles de Ben Yedder al filo de la hora de juego invitaron al optimismo, que finalmente mereció la pena hasta que en el descuento de la contienda Pizarro empujaba a la red el definitivo 3-3.
"Había que apelar al alma del equipo, de forma que si conseguíamos el gol pronto podíamos cambiar las cosas"
Fue memorable y así lo describió Berizzo en la rueda de prensa posterior al encuentro. Para el argentino, el cambio de mentalidad a la hora de abordar la segunda parte fue absolutamente clave: "Lo que cambiamos fue la manera de ver las cosas y transformar el pesimismo en optimismo. Había que apelar al alma del equipo, de forma que si conseguíamos el gol pronto podíamos cambiar las cosas". Y así fue, cuand Ben Yedder lograba recortar diferencias y meter de nuevo al Sevilla en la lucha por los puntos: "El equipo emocionó a la gente, la gente nos llevó hacia adelante y completamos una segunda parte fantástica".
Desde luego, la respuesta del equipo sorprendió a propios y extraños: "Ni el más optimista hubiese imaginado lo que luego pasó. Me siento muy orgulloso por mis jugadores, que hicieron creer a 50.000 personas que todo era posible". Para el técnico, la clave está en el dominio absoluto del partido y de los tiempos a lo largo de los segundos cuarenta y cinco minutos: "Nos metimos en un rol de equipo avasallador, no dejamos pasar de mitad de campo a un rival como el Liverpool y empatamos un partido que nos refuerza enormemente".
"Les dije que podíamos corregir todos los errores en cinco minutos, que podíamos cambiar las cosas"
La charla en los vestuarios en el descanso también tuvo mucho que ver en la revolución que se vio en la segunda mitad: "Les dije que estábamos ante una gran oportunidad que no pasa muchas veces. Que podíamos corregir todos los errores en cinco minutos, que si nos quedábamos pensando en lo que había pasado iba a ser una noche mala, que la podíamos cambiar". El mensaje de Berizzo caló en sus pupilos y por supuesto la afición también puso su granito de arena arropando a los suyos en los momentos clave: "Agradezco la convicción de mis jugadores en esas palabras, el campo se transformó en un campo singular, en el que pueden suceder las cosas que esta vez han sucedido".
Otro punto importante fue el cambio realizado en el intermedio, con la entrada de Franco Vázquez por N´Zonzi para buscar más juego por dentro y creatividad en los últimos metros: "Franco ayudó a encontrar ese pase que en la primera parte no teníamos, llenó de habilitaciones a nuestros delanteros y haciendo retroceder al medio campo rival". Eso hace pensar que esta variación táctica, retirando a un pivote defensivo para dar paso a un medio más asociativo, puede repercutir positivamente en el juego del Sevilla. Berizzo tuvo que admitir que, al menos para este encuentro, fue una solución, pero el entrenador nervionense prefirió restar importancia a los aspectos tácticos: "Evidentemente para jugar al fútbol siempre necesitas mentalidad, y luego si la tienes cualquier dibujo es bueno si crees en él. Cualquier manera de jugar tiene que ver en el cómo lo desarrolles, depende de la convicción y la ejecución".
"Tenemos que pensar en nosotros mismos e ir a Maribor a buscar nuestro triunfo"
Este resultado puede ser muy importante para el futuro inmediato del grupo, ya que el Liverpool aún no tiene su pase matemático para octavos y ello le obliga a ir a por todas ante el Spartak, que si pierde permitiría a su vez el pase automático del Sevilla. Sin embargo, Berizzo prefiere quedar ajeno del duelo entre rusos e ingleses y prefiere centrarse en su propio equipo, que debe ir a Eslovenia a por los tres puntos: "Nuestro empate condiciona el partido Liverpool - Spartak porque el Liverpool no está clasificado y eso va a exigir una victoria. Pero tenemos que pensar en nosotros mismos e ir a Maribor a buscar nuestro triunfo independientemente de lo que suceda en el otro campo".
Por último, aparecía el nombre de Ben Yedder, que nuevamente fue clave para el éxito de su equipo. El técnico quedó encantado con la actuación del francés y reconoce su mérito en un compromiso de semejante envergadura: "Es un delantero muy rápido y muy oportunista, muy vertical. Hoy el partido le premia porque no era un encuentro fácil, con dos centrales rivales tan fuertes, pero ingenió la manera de hacerles daño. Me alegro por él que haya sido protagonista en la remontada del equipo".