Estados Unidos es la gran dominadora del medallero en los Juegos Olímpicos. Si bien en el siglo XX tuvo a la URSS como gran rival y en el siglo XXI a China, la realidad es que el país norteamericano se mantiene como gran dominador de las citas olímpicas, y en Río 2016 vuelve a ser la gran favorita para liderar el medallero al término de la competición. Los deportistas que compiten bajo la bandera de barras y estrellas han logrado un total de 2.298 medallas, más del doble que cualquier otro país. De ese número, más del 25% corresponde a uno de los grandes deportes olímpicos, la natación, que es la segunda disciplina en que los estadounidenses han logrado un mayor número de medallas, consiguiendo un total de 520.
Entre todos ellos, el más destacado no puede ser otro que Michael Phelps. El 'tiburón de Baltimore' es el deportista que más medallas olímpicas ha conseguido en la historia de los Juegos Olímpicos, con un total de 22, siendo 18 de ellas de oro. Considerado como el mejor nadador de la historia, el nadador estadounidense comenzó a forjar su leyenda olímpica en Atenas, consiguiendo seis medallas de oro y dos de bronce en su primera participación en este evento.
Cuatro años después, y consagrado ya como uno de los mejores deportistas del mundo, Phelps tenía ante sí el reto de superar las siete medallas de oro conseguidas por Mark Spitz. El norteamericano consiguó su objetivo y se colgó hasta ocho preseas del metal más preciado, escribiendo una de las páginas más brillantes de la historia del deporte. En los pasados Juegos Olímpicos, el nadador estadounidense logró cinco medallas más, tres de oro y dos de plata, estableciendo un nuevo registro histórico. Cuando su carrera parecía poner el punto y final en la capital británica, Michael Phelps volvió a escena y buscará seguir aumentando su leyenda en Río 2016.
Mark Spitz logró siete medallas de oro en Múnich 1972
Otro nombre que no puede faltar en esta lista es el de Mark Spitz. El californiano entró en la historia del deporte estadounidense en México 1968 al conquistar dos medallas de oro, una de plata y una de bronce. Pero su gran hazaña llegó cuatro años más tarde, un hito que sólo ha superado su compatriota Michael Phelps. Spitz consiguió en Múnich 1972 siete medallas de oro, consiguiendo un pleno de triunfos en aquellos históricos Juegos Olímpicos. Más lejos queda la hazaña de 'Big John'. Johnny Weissmuller consiguió en la década de 1920 un total de cinco medallas de oro olímpicas y una de bronce, consagrándose como el mejor nadador de la historia en ese momento.
Matt Biondi también figura entre los mejores nadadores estadounidenses de la historia. Nacido en California, el norteamericano fue una de las grandes estrellas en Seúl 1988, donde conquistó cinco medallas de oro. A esas hay que sumarles una más lograda cuatro años antes y otras dos en Barcelona 1992, teniendo en su haber un total de ocho medallas de oro, dos de plata y una de bronce en los Juegos Olímpicos. También alcanza la decena de medallas Gary Hall Jr., que compitió en tres Juegos Olímpicos consecutivos (1996, 2000 y 2004) y posee un total de cinco oros, tres platas y dos bronces, si bien la mayoría se deben a pruebas de relevos.
Pero la natación estadounidense no es la mejor de la historia únicamente por los éxitos masculinos. A lo largo de los años, muchas mujeres han escrito páginas brillantes en la historia de la natación olímpica. Una de ellas es Mary T. Teagher, que consiguió tres medallas de oro en Los Angeles 1984 y un bronce en Seúl 1988, todas ellas en la modalidad de mariposa, y muchos la sitúan como la mejor mariposista de la historia de este deporte. Más medallas olímpicas tiene Dara Torres, que fue la primera nadadora estadounidense en competir en cinco olimpiadas (1984-2000). La norteamericana posee 12 preseas, cuatro de cada metal.
Jenny Thompson es la deportista estadounidense con más medallas olímpicas
Janet Evans es otra de las grandes nadadoras de la historia estadounidense. Ganadora de cinco medallas olímpicas (cuatro de oro y una de plata), conseguidas todas ellas en pruebas individuales. Amy Van Dyken también figura en esta lista histórica. La nadadora nacida en Colorado consiguió en Atlanta 1996 cuatro medallas de oro, consiguiendo más que ninguna otra nadadora en los Juegos, y convirtiéndose además en la primera deportista estadounidense de la historia en ganar cuatro medallas de oro en unos solos Juegos Olímpicos. En Sydney 2000, Van Dyken sumó a su palmarés dos medallas más. Por último, cabe destacar a Jenny Thompson. Es la deportista de Estados Unidos que más medallas olímpicas ha ganado a lo largo de la historia, con 12 medallas entre 1992 y 2004, ocho de ellas de oro.
Ya más actualmente encontramos dos nombres propios: Aaron Peirsol y Rebecca Soni. El nadador norteamericano cuenta en sus vitrinas con hasta siete medallas olímpicas, cinco de oro y dos de plata, mientras que su compatriota posee seis medallas, tres de oro y dos de plata, y son dos de los máximos exponentes de la natación estadounidense en la pasada década.
En Río 2016, además del ya mencionado Michael Phelps, los focos mediáticos estadounidenses se centrarán en cuatro nombres propios: Katie Ledecky, Ryan Lochte, Jessica Hardy y Missy Franklin. Los cinco nadadores estadounidenses ya saben lo que es ganar una medalla en unos juegos olímpicos, y algunos están llamados a recoger el testigo de otros deportistas mencionados anteriormente y prolongar el dominio de Estados Unidos en la piscina.