Análisis F1 VAVEL. Red Bull RB11: La versión camuflada del 'toro'

El pasado domingo 1 de febrero, arrancaba la pretemporada de la máxima categoría del automovilismo mundial en el circuito andaluz de Jerez de la Frontera. En ese comienzo se presentaron al público los últimos monoplazas que aún no habían visto la luz, entre ellos, el nuevo Red Bull RB11.

Al contrario que la pasada campaña, donde los austriacos mostraron el coche a través de las redes sociales, este año decidían para pasar directamente a la acción sin presentación previa, viéndose el monoplaza saltar al asfalto instantes después de ponerse en verde el semáforo.

En esa presentación se pudo ver un monoplaza a priori, estéticamente, muy diferente. Con una decoración innovadora, al estilo cebra, camuflando de esta manera los elementos aerodinámicos del nuevo monoplaza de Milton Keynes, el cual mantiene una línea muy conservadora con respecto al RB10 de 2014, aunque según han confirmado los de la bebida energética, el diseño no será el definitivo.

El nuevo monoplaza austriaco presenta leves cambios aerodinámicos con respecto a su versión anterior. Uno de los más representativas puede apreciarse en el alerón delantero, el cual abandona la versión anterior con quilla para mantener un morro más alto, para bajar acercar más al suelo el mismo con una solución muy parecida a la que han utilizado otros monoplazas como el Williams.

Al eliminar la quilla estilo canoa de la pasada temporada, el descenso del morro del monoplaza es más pronunciado que en el RB10, acercándose con esta nueva solución a la vista en otras escuderías como Mercedes.

Ya en la parte central del monoplaza, podemos apreciar que el RB11 no presenta grandes cambios con respecto a su antecesor, con unos pontones bastante amplios con unas generosas tomas de aire se presentan en el RB11, para continuar así con unos deflectores laterales que reconducirán el flujo de aire por la parte central del monoplaza hasta llevarlo a la parte trasera.

La parte trasera no presenta, como en general el monoplaza, grandes cambios con respecto a su anterior versión. Aunque Red Bull ha dejado constancia de ello, los principales cambios del RB11 no se presentan en su exterior, sino bajo la piel del monoplaza, en la que según Rob Marshall, director de ingeniería de la escudería austriaca, “han identificado las áreas donde podemos hacer mejoras y hemos trabajado duro en ellas. No habrá mucho que sea visible a simple vista, pero se ha invertido un montón de duro trabajo en las partes que están ocultas”.

En líneas generales, el RB11 mantiene la línea de 2014, aunque con significativos cambios en su interior con los que intentarán dar caza a los todopoderosos Mercedes. Al igual que los colores presentados, esta se trata de una primera versión del nuevo monoplaza que veremos cómo irá cambiando conforme avancen los test de pretemporada.