La Fórmula 1 ha ganado en competitividad gracias a las nuevas normas impuestas por la FIA y los nuevos dueños; sin embargo, no está exento de críticas. Algunos pilotos, como Daniel Ricciardo, afirman que hay menos aire limpio en las pistas. "Tener coches más anchos es genial y nos han dado más agarres, pero cuando ocupas más lugar en la pista, tienes menos aire limpio, así que eso hace complicado seguir a un coche", declaraba el australiano, una de las voces autorizadas dentro del 'paddock' de la Fórmula 1 a la hora de valorar las nuevas medidas que se han generado a partir de la pasada temporada, en la que de nuevo la escudería Mercedes se hizo con el triunfo final, tanto en el Mundial de pilotos como en el de constructores.
Whiting, al ataque contra los equipos
A estas declaraciones, también están los partidarios de las medidas, como el comisario de carrera, Charlie Whiting. El británico se mostró a favor de todo lo que se realizó en el 2017 por parte de los dirigentes de la Fórmula 1 y criticó en su lugar a los equipos, por la falta de adelantamientos que ha habido, especialmente a los de mitad de parrilla.
"Los cambios de normativa estuvieron bien, pero esta fue la mayor modificación en mucho tiempo y los objetivos que se establecieron se alcanzaron casi por completo. Esos eran hacer que supusiera un reto mayor pilotar los coches y que fueran más bonitos y más rápidos, los más veloces desde hace mucho".
Los grandes, los mayores culpables
"Ahora los coches son muy físicos en curvas de alta velocidad, llegan a los 6G, que está bastante bien, diría. A los pilotos les gusta bastante manejarlos y tienen mejor pinta, así que todas las cosas que nos planteamos lograr, las hemos conseguido en varios grados, depende del tipo de circuito. Supongo que eso fue inevitable, hasta cierto punto, pero siento que hemos cumplido con todos esos objetivos en ese aspecto", afirmó Charlie Whiting, que además quiso hacer hincapié en que si no había adelantamientos era por la culpa de las escuderías, especialmente los de la mitad de la parrilla.
"El mayor problema que hemos tenido este año es que está claro que los tres grandes equipos, si se quieren llamar así, Mercedes, Ferrari y Red Bull, son significativamente más rápidos que el resto. No creo que la competición haya sido mala, es sólo que algunos han hecho un trabajo mejor que otros, nada nuevo en la Fórmula 1", ha concluido Charlie Whiting.