"Largos inviernos, largas temporadas en el pasado, pero ahora podemos luchar, podemos luchar". Esas fueron las palabras de Fernando Alonso tras acabar el Gran Premio de Australia en la quinta posición. Carrera que ganó el alemán Sebastian Vettel. El piloto de Ferrari aprovechó la entrada del Safety Car en pista para recortar siete segundos a Hamilton y conseguir el "undercut". Hamilton lo intentó pero finalmente se tuvo que conformar con la segunda posición. Completó el pódium el finlandés de Ferrari Kimi Raikkonen.
Summer is coming
Tres temporadas con la unidad de potencia Honda y el mejor resultado de Fernando Alonso fue la quinta posición. Tan solo le ha bastado con una carrera para igualar ese mejor registro. El asturiano ha declarado nada más acabar la carrera por la radio que estaba muy orgulloso de el trabajo de los suyos, y no es para menos, por fin tiene un coche con el que puede luchar, un coche con el que puede disfrutar, como ya ha comentado en más de una ocasión. Primera carrera y primer galardón a mejor piloto del Gran Premio. Vienen buenos momentos, pero no será hasta la primera gran evolución en el Gran Premio de España cuando se vea de verdad.
En estos momentos está un paseo por detrás de los tres grandes, está luchando por la cuarta posición con Renault y Haas. Pese a la corta experiencia de McLaren con Renault ya se ven atisbos de que este binomio puede funcionar, nada que ver con el que había anteriormente. Las sonrisas en el box de McLaren vuelven, nada que ver con lo que sucede en Toro Rosso. La escudería de Faenza sufrirá lo que es tener el motor Honda, en la primera carrera de la temporada Gasly tuvo que abandonar en la vuelta 15 y Hartley acabó en la decimoquinta y última posición.
Alonso y en especial McLaren están viendo la luz al final del túnel, la segunda mejor escudería de la historia esta más cerca de volver a donde realmente se merece.
Vettel borra a la sonrisa a Hamilton con una gran estrategia
Ferrari volvió a ganar la partida a Mercedes en cuanto a la estrategia. La escudería de Maranello puso el anzuelo a Hamilton en las vuelta 19 con la parada de Kimi Raikkonen. En la vuelta siguiente Hamilton paraba para evitar así el "undercut".
Con esta parada automáticamente los de Mercedes eliminaban a un aspirante a la victoria, pero fue cuando Romain Grosjean paro su monoplaza tras la curva 2 cuando los estrategas de Ferrari comenzaron la jugada maestra. La distancia real entre Vettel y Hamilton era de 7 segundos, era el momento de intentarlo y le salió bien la jugada al germano. Vettel paró cuando la carrera estaba parada con el Virtual Safety Car y puso patas arriba la carrera y especial a Mercedes y a la fábrica de Brackley.
Esta parada valía una victoria y así fue, el alemán solo tenía que defender la posición en un circuito que es muy complicado adelantar. Finalmente Vettel con un gran ritmo mantuvo a Hamilton a ralla y consiguió su 48º victoria y se aúpa a la primera posición de la clasificación del Mundial de Formula 1. El artífice de esta gran remontada ha sido un español, el ingeniero de estrategia Iñaki Rueda.
Del éxtasis al fracaso
El equipo que sale más damnificado del Gran Premio de Australia es sin duda Haas. La escudería estadounidense estaba cuajando una gran carrera, sus dos coches dentro de los siete primeros pero dos errores garrafales en el paso por boxes les ha obligado a acabar la carrera antes de tiempo. Primero fue Kevin Magnussen y posteriormente el francés Romain Grosjean. Este último, con su parada después de la curva 2, hizo que saliera el Safety Car.
Estos errores no se pueden permitir en una competición tan igualada como esta, si cometes un error lo pagas y eso les ha ocurrido a Haas. Pese a ello han mostrado un gran rendimiento durante todo el fin de semana y se prevé que esté luchando en las primeras carreras por entrar dentro de los diez primeros. Una de las imágenes del Gran Premio fue cuando Romain Grosjean está consolando al mecánico que falló en el pit stop, compañerismo 100%.
Honda, la vida sigue igual
Toro Rosso se frotaba las manos en la pretemporada con el cambio de unidad de potencia, pero en este Gran Premio ha habido una imagen bastante diferente. Honda nunca ha tenido un gran rendimiento y menos una gran fiabilidad, los números están ahí en las tres peores temporadas de McLaren en toda su historia.
Estos cambios bruscos en la Formula 1 no suceden, no vas a cambiar lo que has sido tres temporadas en solo unos meses, y así ha sido, volvió la fumata blanca en el coche de Pierre Gasly en la vuelta 15. Eso no es todo, durante todo el fin de semana han sido junto a Sauber los últimos de la parrilla y parte de culpa la tiene la unidad de potencia nipona, hay que recordar que Sainz cuajó una gran clasificación metiendo en la Q3 la temporada pasada con motor Renault. Un año más tarde y con las mejoras en el coche no han conseguido superar ese registro. Al otro lado del box las cosas fueron algo mejor, al menos consiguió acabar el neozelandés Hartley, eso sí en la decimoquinta y última posición.
Pinta mal la temporada para Toro Rosso, poca fiabilidad y pobre rendimiento. La escudería austriaca acaba contrato con Renault y se ha rumoreado con que firmaran con ellos en 2019.