El partido si bien fue muy peleado, hubo poco fútbol, lo cual se vió reflejado en el resultado. Un justo empate sin goles, los dos atacaron en momentos claves, y se defendían bien. En el primer tiempo, ninguno lo de los logró ser superior, y estuvieron lejos de ser aquellos equipos que se vieron a lo largo del campeonato. El primero en avisar fue Danubio con un remate de Martiñones, que se perdió apenas afuera del arco de Cristóforo. Luego Martiñones, quien fue uno de los desequilibrantes de los franjeados, remató nuevamente al arco pero volvió a fallar. Para el bohemio, el encargado de poner en alerta a los de la franja fue el muy buen jugador Santiago Martínez, pero el golero Salvador Ichazo contuvo.
En el segundo tiempo, Ignacio Gonzalez al primer minuto de juego, se fue rápidamente al área quedando de cara al gol, pero el remate se perdió apenas afuera. Gran descuido de la defensa del equipo del prado. Luego, Martin Díaz, con un magnífico cierre, terminó con lo que podría haber sido la apertura del marcador para los de la curva. Mientras Danubio complicaba cada vez más a Wanderers, el DT Alfredo Arias, realizó dos cambios en busca de refrescar el partido. Con el ingreso de Cabrera y Albarracín, Wanderers buscó ser un poco más, incluso, en los últimos minutos del encuentro pudo convertir, pero se encontró con un Ichazo que desactivó todas las jugadas de peligro.
Ahora, habrá que esperar hasta el domingo para saber quien se quedará con el título de Campeón Uruguayo.