Sin un resultado consumado, el boxeo argentino llegó a la cima de la mano de Marcos el Chino Maidana (35-4; 31KO). Esta noche volverá a enfrentar a Floyd Mayweather (46-0; 26KO), el púgil que domina el deporte hace más de diez años. Es la segunda vez en su carrera que da una revancha, lo que da la pauta de que el santafesino se destacó entre los demás rivales. El número uno libra por libra venía de vencer a sus últimos oponentes por un amplio margen, generando las quejas de los fanáticos que lo acusaban de buscar peleas fáciles. Cansado de los reproches, Floyd recurrió al duro pegador de Margarita. No una, sino que dos veces.

En juego estarán en título welter AMB y CMB, además del superwelter del Consejo. Sin embargo, para el retador hay mucho más que eso: la oportunidad de convertirse en el primer boxeador en derrotar a Mayweather. Si bien ya quedó en la historia del pugilismo nacional con el solo hecho de hacer el gran papel que realizó en el primer choque, el hambre de gloria lo lleva a Maidana a intentar romper el cero en el récord de Floyd.

El estadounidense se salió con la suya, ya que logró hacer que su rival peleara con unos guantes que no son los que viene utilizando en sus últimas presentaciones. El relleno de éstos es más acolchonado, por ende disminuirá el poder del golpe del Chino. Por otra parte, el campeón anunció que luego de enfrentarse con Maidana, realizará las dos peleas que le quedan por contrato (mayo y septiembre) y luego analizará la posibilidad del retiro, para dedicarse de lleno a su carrera como promotor. 

La velada, que se realizará en el MGM de Las Vegas, será televisada para Argentina por Space (21hs) y por la TV Pública (22hs). La pelea estelar será cerca de la medianoche. En los combates preliminares se presentará Fabián TNT Maidana, hermano del Chino, y Damián Pana Sosa, otro argentino que se entrena bajo las órdenes de Robert García. Sus rivales serán Jared Teer y Armando Lopes, respectivamente. La programación de todos los enfrentamientos los encontrará en este link. 

El libro y la pluma están listas. Solo falta que alguno de los dos llegue primero y escriba con letras de oro su apellido en la historia grande del boxeo mundial.