El titular del cinturón de peso pesado de las marcas de AMB, FIB, OMB, IBO, Fury, sostuvo su corona al poder imponerse en un combate desgastador ante Wallin; en el que asimismo sobrellevó unos cortes importantes sobre su ojo derecho. Los cortes proporcionados por el antagonista del campeón fueron en el tercer asalto en donde llegó a estar sentido.
Pese a dicha lastimadura leve que consideró el réferi Tony Weeks, el mismo pudo reponerse para dominar en la mayoría de asaltos y en el último fue un poco desequilibrado debido a que su rival Otto pudo llegarle con buenos derechazos. Las tarjetas finales para que retuviese el titulo fueron de 116-112, 117-111, 118-110.
Pero el foco final o lo que dejó la pelea en si; fueron los cortes que sostuvo durante la misma el propio Tyson Fury con ayuda de sus médicos personales y con los de la organización que le dieron luz verde para que llegase al final del combate. “The King” tenía una fuerte cisura en la ceja y otro en el párpado derecho por lo que para sanar dicha lesión tuvieron que engraparle 47 puntos en la ceja y su borde mismo.
Por dicha herida deberá mantenerse en inactividad por lo que resta del año y algunos meses o días del año entrante para estar en su plenitud, en cuanto a lo físico; es por ello que se especula ver su retorno al ring en 2020 con una posible revancha contra Deontay Wilder, pero lo primero deberá esperar la sanación completa de dicha marca física.