Paulo Dybala rescató a la Roma

Hace instantes el equipo de José Mourinho dejo pasar la chance de alcanzar momentáneamente al Inter y empató 1-1 en su visita al Lecce en una nueva fecha de la Serie A. El delantero cordobés convirtió el empate final.

Paulo Dybala rescató a la Roma
NO LO CELEBRO. Paulo Dybala optó por no festejar su gol y agarro rápido para la continuidad del juego. Foto: Web
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Por Nico Castillo

Deja la sensación que es una igualdad con gusto a poco, Roma en la previa tenía como misión sumar tres puntos y esperar atento a lo que iba a suceder este lunes desde las 16:45 en el encuentro entre Inter y Sampdoria. ¿Por qué? si el conjunto conducido por José Mourinho se quedaba con las tres unidades y trepaba a la segunda ubicación, siendo al menos por 48 horas el único perseguidor del puntero Napoli que todo parece indicar se encamina al Scudetto.

Sin embargo, en un encuentro que a priori era accesible terminó siendo todo lo contrario y solamente se pudo traer un punto del Via del Mar, la habitual casa del Lecce que se encuentra en el medio de la tabla de posiciones del Calcio. La noche comenzó complicada para el club de la capital y a los siete minutos del primer tiempo ya perdía 1-0 por el insólito gol de Ibáñez, el defensor brasileño la metió en contra sorprendiendo a Rui Patricio para la ventaja parcial del dueño de casa.

Hasta diez minutos más tarde, una mano en el aérea del elenco de Marco Baroni en una rápida jugada que hizo dudar a la terna arbitral encabezado por Gianluca Aureliano sancionó no la pena máxima y la ejecución estuvo a cargo de un especialista en este rubro. Paulo Dybala, uno de los autores en la tanda de penales en la recordada final de la Copa del Mundo, agarró la pelota y la cruzó al palo opuesto de Wladimiro Falcone, el ex atacante de Instituto estampo el 1-1 transitorio.

En esta temporada, los números del jugador de 29 años son sorprendente, lleva anotado once goles en 21 partidos disputados con la Roma, además tiene seis asistencias en su cuenta personal. Dybala apareció en el momento justo y salvo al equipo de Mourinho de una derrota que hubiera significado un baldazo de agua fría.