Este fin de semana se ha celebrado la 111° edición de la Milán-San Remo, la cuál ha sido la más larga de la historia con 306 kilómetros de longitud y con más metros de desnivel que otras ediciones y con mucho más calor de lo que es habitual en esta carrera, factores que han hecho de este año, una edición especial de la "classicissima". La carrera contaba con una participación excelente y no defraudó ya que la carrera fue preciosa. La carrera además tenía el aliciente especial de que Philip Gilbert pudiera ganar su quinto monumento y cerrar el circulo de los grandes monumentos y entrar aún más en la historia del ciclismo de lo que ya está, pero finalmente, se tuvo que conformar con la novena posición.  

La carrera transcurrió tranquila con una escapada de siete hombres, Manuele Boaro (Astana),Mattia Bais (Androni Giocattoli), Marco Frapporti (Vini Zabú), Damiano Cima (Gazprom), Alessandro Tonelli y Fabio Mazzuco (Bardiani) y el español Héctor Carretero (Movistar). La fuga estuvo durante más de 200 kilómetros viva. El primero en quedarse de la misma fue Héctor Carretero a falta de 70 kilómetros, la fuga se quedó en seis integrantes, pero cada vez con menos vida, ya que el equipo Trek Segafredo empezó a mover la carrera, con Jacopo Mosca, pero sus ataques no tuvieron éxito. La fuga fue cazada a 35 kilómetros de meta, con Manuele Boaro como integrante más duro en la fuga. A raíz de ese momento, tanto Deceunick- Quick Step como el Bora- Hansgrohe, se pusieron en las primeras posiciones del pelotón y llevaron un ritmo frenético hasta la subida de la Cipressa. En la subida a la Cipressa, ciclistas como Gaviria, Ewan o Cortina, este último por un pinchazo, se quedaron sin opciones de victoria en la carrera. El grupo de aspirantes a la victoria se quedó en 40 o 50 corredores hasta la subida al Poggio.

En el Poggio, subida que se inicia a 9 kilómetros  para la linea de meta, inició con Daniel Oss en cabeza, pero pronto fue cazado por el ritmo del Jumbo Visma y del Trek Segafredo. A falta de 2 kilómetros para coronar el Poggio, Vincenzo Nibali intentó un duro ataque que dio continuidad Julián Alaphilippe, al que siguió Wout Van Aert, pero al que llegó a soltar en el final del puerto. El ciclista francés coronó con cinco segundos sobre Van Aert y diez sobre el pelotón. En la bajada del Poggio, Van Aert cazó a Alaphilippe y los dos se disputaron el triunfo final. En el sprint final ganó el ciclista belga, Wout Van Aert, por muy poca distancia sobre Julian Alaphilippe, que se tuvo que conformar  con la segunda posición. En la tercera posición finalizó, Michael Matthews (Sunweb). Destacada actuación de Alex Aramburu (Astana), finalizando en séptima posición en su primera participación en esta carrera y con tan solo 23 años de edad en su primer año en el WorldTour. Gran sensación y un punto de ilusión para el ciclismo español. 

Wout Van Aert pinta a ser un ciclista de época y a tener la opción de ganar los cinco monumentos. Cada día demuestra algo nuevo y su futuro es muy prometedor. La gran noticia, es que Alaphilippe ha vuelto a su nivel y esta listo para volver a ganar. El primer monumento, no defraudo.