La continuidad de Jolyon Palmer en Renault durante la temporada de 2017 sorprendió por la poca competitividad que había demostrado durante la temporada de su debut, donde solo consiguió un punto. El único punto que aún figura en su currículo, por lo que los rumores se han desatado en torno al tiempo que le queda en el Gran Circo.

Primero, tuvieron como protagonista a Robert Kubica, del que se habló que podría sustituir a Jolyon si sus test en Hungría resultaban satisfactorios, como así fue. Desde el Gran Premio de Italia, las filtraciones apuntan que sería Carlos Sainz su sustituto, consiguiendo Renault de esta forma a un piloto por el que ya se interesaron. Las últimas noticias apuntan que el madrileño podría subirse a un Renault ya en el Gran Premio de Malasia de esta temporada.

Jolyon Palmer lucha con Pascal Wehrlein durante el Gran Premio de Bélgica | Fuente: Zimbio
Jolyon Palmer lucha con Pascal Wehrlein durante el Gran Premio de Bélgica | Fuente: Zimbio

Todo esto parece no perturbar a Jolyon: “Tengo contrato para las próximas siete carreras. Los rumores no son nuevos, así que nada ha cambiado. Antes de nada, yo estoy centrado en el trabajo que tengo que hacer y no suelo prestar atención a esos rumores. Quedan siete carreras esta temporada y no pienso en eso. Ha sido un año duro, aunque estamos mejorando el rendimiento y las últimas dos carreras han sido buenas”.

Lejos de hacer autocrítica, el británico achaca a las fallas mecánicas sus malos resultados: “La fiabilidad me ha limitado este año porque si el coche no funciona yo no puedo conseguir puntos. En sitios como Silverstone o Bakú, perdimos puntos porque hasta Sauber en los puntos, creo. No ha sido ideal, eso seguro, aunque el equipo está intentando arreglarlo y aprender de los errores y sacarlo adelante para parar esta tendencia y tener un coche sólido y una buena fiabilidad en las próximas carreras y así podré demostrar lo que puedo hacer”.

Mientras, algunos medios alemanes y españoles sitúan ya a Carlos Sainz en el asiento de Jolyon Palmer desde Sepang. “Voy a estar en Malasia y voy a correr hasta Abu Dabi”, se repite el inglés. El tiempo dirá quién se equivocaba.