Jenson Button ha ofrecido a todo el mundo, su punto de vista sobre todos los pilotos con los que compartió pista durante toda su etapa dentro de la Fórmula 1, en su autobiografía 'Vida al límite', esta ha sido una experiencia que sin duda le ha dejado marca. Jenson sólo pasó una temporada junto a Ralf Schumacher, pero eso ya le fue suficiente al británico  para darse cuenta de cómo era él, sobre todo cuando recuerda lo peculiar que fue la manera en la que ambos se conocieron por primera vez.

"Yo llevaba diez segundos como piloto de Fórmula 1 de Williams, tartamudeando, aguantándome las lágrimas y pensando 'se lo tengo que decir a mamá y papá', cuando de repente Ralf irrumpió en la habitación, se puso delante de Frank Williams y puso su mejor cara de superestrella. 'No vendré mañana si el coche no me está esperando', señaló enfadado", explicaba el británico.

El hermano pequeño de Michael Schumacher estuvo nada más y nada menos que seis temporadas dentro de la escudería de Williams, la primera fue en el año 1999, un año antes que el propio Button,  por eso es normal  que en parte viese al británico como una gran amenaza por su posición en el equipo, aunque eso no le daba razones para ser tan caprichoso según el de Frome: "Yo pensaba 'maldita sea, no puedes hablarle a Frank así', pero Frank mantuvo su equilibrio, no le molestó mientras Ralf siguió. 'En serio, en serio, Frank. Si no tengo el coche esperando por mí a la puerta del hotel o si llega tarde, no vendré, no voy a probar' ", comentaba.

Frank Williams, líder del equipo, se mantuvo tranquilo en todo momento, seguramente porque ya se había acostumbrado a ese tipo de situaciones y le anunció a Ralf el fichaje de Button. Fue entonces cuando el propio Jenson describe ese año en el que un piloto inglés llegaba a una escudería británica: " 'Vamos a asegurarnos de que lo tienes allí mañana', dijo Frank calmado y cuando Ralf estaba a punto de comenzar a contonearse, Frank añadió 'más importante, Ralf, he optado por Jenson como segundo piloto'. Ralf miró a Frank y luego a mí 'sí, lo sé' ". Si Ralf realmente lo sabía o estaba siendo un engreído no se sabe, De cualquier manera, fue una forma rara de comenzar una relación con un compañero de equipo. Ralf siempre me pareció algo inseguro, como si tuviera miedo de que le usurparan. Nunca me trató como un igual, podría haber sido por mi edad o por la barrera del idioma", explicó Frome para zanjar.