Sólo hay una palabra para describir el actual estado de forma del equipo del preparador italiano: impresionante. Con la victoria conseguida hoy ante el Chievo, igualan la racha conseguida por Conte de doce victorias consecutivas en Serie A y se colocan en lo más alto de la clasificación a la espera de lo que haga el Nápoles en su partido.
Todo tiene aún más mérito si se echa la vista atrás y nos fijamos en el pobre inicio de temporada de la escuadra juventina: sólo tres victorias y tres empates en los primeros diez partidos de la temporada. Un bagaje muy pobre para un equipo que aspira todos los años a ganar la Serie A. Pero Allegri no quiere que se les suba el récord a la cabeza y se acaben distrayendo del objetivo de final de temporada: "No me interesa. No querría lograr 20 victorias consecutivas y después no ganar el Scudetto. La remontada está conseguida, aunque no me esperaba haberlo hecho tan rápido, pero aún faltan 16 partidos, estamos en un buen momento y ahora hay que seguir así y continuar mejorando". A pesar del gran encuentro que han realizado sus pupilos hoy en Verona, sigue señalando que hay cosas que se pueden mejorar e insiste en el discurso de que los resultados valen a final de temporada: "Hay margen de mejora a nivel de individualidades, físicamente y a nivel de mentalidad. Tengo siempre en la mente la imagen del último minuto en Carpi, porque en ese momento estuvimos a punto de tirar por tierra la remontada. No debemos olvidar eso ni dónde estábamos hace diez partidos. Recordarlo nos valdrá para mantener alta la tensión".
Por último, al ser cuestionado por el buen estado de forma del español Morata (cuatro goles en lo dos últimos partidos), Massimiliano declaraba lo siguiente: "¿Morata? Llevaba un par de semanas marcando en los entrenamientos, y cuando sucede eso es difícil que no se repita en el partido".