Irlanda vuelve a una Eurocopa cuatro años después tras una clasificación de infarto: último partido del grupo a vida o muerte contra Polonia y play off para la historia contra Bosnia-Herzegovina (2-0 en el Aviva Stadium).

Y lo hace de nuevo encuadrada en el grupo de la muerte (hace cuatro años también compartió grupo con Italia, además de España y Croacia). Esta vez, además de los transalpinos, la Suecia de Ibrahimovic y la potente Bélgica se cruzarán en su camino. La suerte irlandesa parece tenerle reservada siempre las plazas más complicadas, pero el equipo gaélico si por algo se caracteriza es por crecerse ante la adversidad.

De hecho, pese a lo agónico que haya parecido el camino hasta Francia, Irlanda puede presumir de que llega a esta Eurocopa sin saber lo que es perder ante la Campeona del Mundo. Una Alemania a la que se enfrentaron dos veces en la clasificación, con la que empataron en tierras germanas y a la que vencieron con el mágico tanto de Shane Long en el verde dublinés.  

El grupo por encima de todos

Una de las cosas que más llama la atención de esta Irlanda es el poco compromiso que tiene O'Neill con nadie. Juega quien se lo merece, y las estrellas han dejado paso al peso del grupo. Incluso en el banquillo, donde el tandem O'Neill - Roy Keane no es nadie el uno sin el otro. Hasta Robbie Keane lo ha entendido, y permanece en el grupo para sumar. 

El juego de Irlanda

La República de Irlanda es una selección compuesta por jugadores que en su mayoría militan en la Premier League. Prácticamente todos ellos comparten un patrón idéntico de juego, como si el mismo sastre les hubiera confeccionado. Intensos, dinámicos, muy verticales y sobre todo con una capacidad de ida y vuelta asombrosa. En la delantera, el equipo mezcla pasado mítico de Keane con el presente y espectacular estado de forma de Shane Long. El delantero del Southampton ha disputado 22 partidos en los que ha anotado siete goles, aprovechando todas las oportunidades que le ha brindado Koeman en el Southampton.

El mítico Robbie Keane. Foto: UEFA
El mítico Roy Keane. Foto: UEFA

En mediocampo, McGeady, quien ha sufrido un bajón en las útlimas temporadas, sigue aportando su característica verticalidad, aunque no parte como favorito para jugar de titular. Hoolahan, del Norwich City, parece el hombre indicado para liderar al equipo en tres cuartos de campo. Otro de los clásicos que copan el mediocentro británico es Walters. El futbolista del Stoke City es sin duda uno de los pilares de está selección. El compromiso, la brega y la capacidad de mezclar talento con intensidad le hacen sin duda uno de esos futbolistas que le dan a Irlanda un salto cualitativo en comparación con las otras selecciones de la clase baja. Su acompañante en el medio campo será James McCarthy, que no ha contado con su mejor temporada en el Everton, pero se trata de un jugador de calidad contrastada que aporta buena circulación al medio campo irlandés.

Coleman es la gran estrella en defensa

En defensa destaca sin duda Seamus Coleman, el lateral derecho del Everton, sin duda uno de los carrileros con más proyección ofensiva de la Premier League. Para Roberto Martínez ha sido un fijo en su club, ya que su capacidad para subir la banda y poner grandes centros le hace ser uno de aquellos jugadores que siempre suenan para equipos más grandes en el mercado. Irlanda es una selección con futbolistas clásicos en cada una de sus líneas, y en defensa no podría ser diferente. John O’sea el exfutbolista del Manchester United y actualmente del Sunderland es el típico central aguerrido, contundente y con un gran juego aéreo que dota a la selección irlandesa de experiencia y solidez en fase defensiva. 

Samus Coleman. Foto: Sky Sports
Samus Coleman. Foto: Sky Sports

Una selección con ADN británico

La República de Irlanda es una selección dinámica, vertical, intensa, que aúna todos los requisitos que suele reunir un equipo o selección británica. A nivel individual, no es un equipo pobre, sino todo lo contrario, tiene jugadores de gran calidad técnica. El hecho de contar con futbolistas experimentados y acostumbrados a jugar partidos de primer nivel, les hace ser una selección muy competitiva y capaz de plantarle cara a cualquiera. El estar ahí ya es un premio para Irlanda, y de bien seguro que no darán su brazo a torcer a las primeras de cambio, porque el orgullo británico puede llegar a mover montañas. 

Convocatoria completa

Porteros: Darren Randolph, Shay Given, Keiren Westwood.

Defensas: Seamus Coleman, Cyrus Christie, John O’Shea, Ciaran Clark, Shane Duffy, Richard Keogh, Robbie Brady, Stephen Ward.

Centrocampistas: : Glenn Whelan, James McCarthy, Jeff Hendrick, Wes Hoolahan, James McClean, Aiden McGeady, Stephen Quinn, David Meyler.

Delanteros: Shane Long, Jon Walters, Daryl Murphy, Robbie Keane.

Posible once titular

En definitiva, la República de Irlanda es una de esas selecciones que en un primer momento no estaba invitada a la fiesta, pero que se ha metido en la Eurocopa de Francia 2016 por méritos propios. Quién sabe si será capaz de dar la campanada en un grupo, cuanto menos, complicado. Corazón nunca les faltará.