Era muy esperado este partido por parte de la afición local, ya que en la pasada temporada DC United fue el único equipo que consiguió vencer a Atlanta las tres veces que ese vieron las caras durante la temporada regular. Un lleno espectacular con un mejor ambiente hacía que los jugadores locales tuvieran que dar el doble de lo habitual para llevarse la victoria y dar una alegría a sus seguidores. Cosa que hicieron.

Sonaba el pitido inicial por parte del colegiado y todo surgía con normalidad y con mucho respeto por parte de ambos equipos. Sería Atlanta quien diera el primer susto con una internada de Villalba por banda ejecutando un buen centro pero sin que Mártinez pudiera alcanzarlo. Los locales daban a entender al rival lo mucho que iban a sufrir con esos centros laterales durante los noventa minutos de juego. Nuevamente y pocos minutos después de la peligrosa llegada de Villalba, Almirón empezaba a meterse en el partido dando una asistencia para que Gresso batiera a placer al guardameta rival, pero este realizara una buena parada mandando el balón a córner y desbaratando una nueva ocasión de gol.

Los minutos pasaban y era cuestión de tiempo que Atlanta introdujera en la balón en la red ya que eran ellos los que estaban ofreciendo más que el rival y llegando con mayor peligro al área contraria.  Almirón y Martínez eran los que llevaban la batuta de su equipo y originaban las ocasiones más peligrosas para su equipo con disparos sobre todo desde fuera del área. Fue en una de estas internadas por banda del propio Villalba en la que esta vez Martínez si gana la posición a una despistada defensa por parte de DC United e introduce a placer el balón en la portería sin que el portero visitante pueda hacer nada para evitar el tanto local.

El partido se ponía muy de cara para los de Atlanta que eran los únicos que parecían ofrecer cierto fútbol durante los minutos ya jugados. Poco más se podría decir de la primera parte en la que el resto de minutos se pasearon ambos equipos el balón por el centro del campo y ocasionando prácticamente ninguna ocasión más en la primera parte.

Comenzaba a segunda parte y la historia parecía la misma, un monólogo por parte de Atlanta que llegaba y llegaba y solo era cuestión de tiempo que ampliara su cuenta en el marcador. 20 minutos aguantaron los de DC United antes de que les metieran el segundo gol. Esta vez sería Almirón quien tras un muy buen control fuera del área pondría el balón con su pierna izquierda en la mismísima escuadra sin dejar opciones al meta rival y causando la euforia tanto en su equipo como en su afición. Pero la historia no terminaría ahí. Nuevamente Almirón, mejor jugador de su equipo en este partido, botaría un mal córner, pero el rechace volvería a caerle a los pies centraría de nuevo el balón y esta vez si iba a encontrar un rematador dentro del área pequeña. Villalba, un jugador que no se caracteriza por su juego aéreo lograría un muy buen remate de cabeza, eso si sin ningún marcador a su alrededor.

Ya en los momentos finales del partido DC United “arreglaría”  o “maquillaría” el resultado con un gol del recién llegado esta temporada Mattocks tras un descuido de la defensa local. El partido finalizara con un 3-1 en el marcador a favor de Atlanta siendo tanto Martínez como Almirón o Villalba un quebradero de cabeza para el equipo rival y devolviéndoles la moneda de haber perdido todos los encuentros frente a ellos la campaña pasada.