Inter y Juve disputaron uno de esos partidos que se recordarán durante años. Ambos equipos se jugaban mucho, el Inter estar en Champions la próxima temporada y la Juventus el Scudetto. En el encuentro hubo de todo, expulsiones, polémica, golazos y sobre todo emoción a raudales. Cuando parecía que la Juve había claudicado, tras la heroica remontada interista, dos goles en los minutos finales dieron la victoria a los bianconeros.
Tras esta victoria, la Juventus se coloca provisionalmente con cuatro puntos por delante del Nápoli, mientras que el Inter se complica seriamente sus opciones de disputar la máxima competición continental la temporada que viene.
La Juve golpea primero
El Giuseppe Meazza lucía sus mejores galas y muy pronto comenzaron las hostilidades. La primera llegada de peligro la protagonizó la Juve, ocasión que sería el prefacio del primer gol del partido que llegó poco antes del cuarto de hora. Pjanić botó una falta y el balón le cayó a Douglas Costa en el segundo palo, el delantero brasileño empalmó una gran volea ante la que nada pudo hacer Handanovič. Al Inter se le iban a poner las cosas todavía más difíciles, ya que Vecino realizó una entrada criminal que le costó la roja. El colegiado pudo expulsar al argentino gracias a la crucial intervención del VAR.
El Inter, con uno menos, aguantó las acometidas de la Juve en la primera mitad como pudo. Douglas Costa e Higuaín, a punto estuvieron de lograr el segundo gol que ya terminaría de sacar a los locales del partido. El primer acercamiento peligroso para los interistas, fue un tiro lejanísimo de Brozović que a punto estuvo de sorprender a Buffon. La Juve se pudo ir al descanso con otro gol de ventaja, pero el VAR de nuevo fue el protagonista y ayudó al árbitro a anular el gol de Matuidi en claro fuera de juego. Sin más acciones destacables, se llegaría al final de los primeros cuarenta y cinco minutos.
Locura tras la reanudación
Lo mejor del partido estaba por llegar, el Inter a pesar de contar con un jugador menos dio un paso adelante y empezó a llegar con más asiduidad a la meta de Buffon. Nada más comenzar la segunda mitad, llegó el gol del Inter. Cancelo botó una falta y el goleador Icardi batió a Buffon con un soberbio cabezazo. Empate muy meritorio el que conseguían los locales, que todavía siguieron buscando más. Tras el gol de Icardi, llegaron los mejores minutos del cuadro de Spalletti. Después de una maravillosa recuperación, Perišić se internó en el área de la Juve y puso un pase de la muerte que Barzagli introdujo en su propia portería. El Inter remontaba el partido y la locura se desató en las gradas del Giuseppe Meazza y en todos los hogares de Nápoles.
Por todos es sabido que nunca hay que dar por muerta a esta Vecchia Signora. Los jugadores bianconeros se lanzaron al ataque y tras dos grandísimas intervenciones de Handanovič, llegó el gol que igualaba la contienda. Cuadrado apuró línea de fondo y su centro fue desviado por Škriniar para colarse en la meta defendida por el portero esloveno del Inter. Parecía que el partido acabaría en tablas, pero fue entonces cuando apareció la cabeza del Pipa Higuaín para darle los tres puntos y quien sabe si el Scudetto a la Juventus. Los de Allegri celebraron el gol del delantero argentino como si de un título se tratase. Tras este tanto in extremis, el colegiado pitó el final del encuentro.
Sin duda alguna, este partido será recordado como uno de los mejores Derbis de Italia de la historia, por todo lo que ofreció y lo que se jugaban todos. Merecieron ganar los dos conjuntos, debido al esfuerzo titánico de ambos. En la siguiente jornada el Inter visitará al Udinese, para intentar lograr una victoria que les acerque al objetivo. Mientras que la Juventus recibirá al Bologna con la única intención de acercarse más al Scudetto.