Emoción y tensión en el Giusseppe Meazza
El Giusseppe Meazza estaba cargado de emotividad por el homenaje que se le rindió en la previa a un Chiellini que cumplió 100 partidos con la Nazionale y de tensión por la urgencia de la Azzurra por conquistar la victoria para alejarse del fantasma de la eliminación. Italia recibía a una Portugal que llegaba con la tranquilidad de saber que con un empate le alcanzaba para asegurarse el liderato del grupo y así lograr su pase a la Final Four de la Uefa Nations League.
Roberto Mancini mandaba un 4-3-3 al campo con Verratti y Jorginho alternándose la responsabilidad de construir el juego y con un Insigne que de vez en cuando se acercaba a ellos para triangular y crear superioridad numérica en el medio campo. Tan sólo transcurrieron 5 minutos para que estos 3 talentosos protagonizaran una preciosa jugada que finalizó Insigne con un potente remate desde fuera del área que despejó Rui Patricio al corner.
Espectáculo
Desde el primer minuto Italia demostró una actitud ambiciosa al adelantar las líneas para ahogar la salida de una Portugal que se vio abrumada en los primeros momentos del partido. La posesión de los italianos era audaz, creativa y contaba con la movilidad permanente de todos sus futbolistas al servicio del balón, era un espectáculo. La recuperación post-perdida en campo rival les permitió contar con varias ocasiones de peligro que no pudieron concretar de la mejor manera. Un Chiellini imperial lideró a una defensa italiana que sufrió algunas de las transiciones de los portugueses pero que al final pudo salir ilesa.
Empate y un nuevo fracaso
Italia lo intentó hasta el final pero no pudo conseguir la victoria. El empate a 0 los deja fuera de la Uefa Nations League y así suman un nuevo fracaso a pesar de las buenas sensaciones que dejaron ante Portugal.