“El pequeño general”, apodo por el que se le conoce a Dick Advocaat en el fútbol holandés, atendió a los medios de comunicación en la rueda de prensa previa a los dos amistosos que tiene programados la Selección holandesa, primero, frente a Escocia, y después, ante Rumanía. Para sorpresa de todos, el vigente seleccionador anunció que dejará su puesto una vez se disputen dichos enfrentamientos: “Estos dos partidos serán los últimos al frente del equipo. Después, lo dejaré”, dijo.

Dick Advocaat, de 70 años, tomó el mando de la selección por tercera vez en su carrera (la primera se remonta a la Copa Mundial de Fútbol de EEUU en 1994; la segunda fue en 2002) el pasado mes de mayo. El objetivo era enderezar el rumbo y clasificar a Holanda para el Mundial, sin embargo, las cosas no han ido cómo se esperaban. Los resultados y el juego del equipo no han sido los adecuados, por lo que la “Oranje” verá el próximo Mundial de Rusia por televisión.

Su experiencia en los banquillos (ha entrenado a múltiples equipos como el PSV, el Glasgow Rangers, el Zenit de San Petersburgo, AZ Alkmaar… y a otras selecciones como la de Rusia, Bélgica o Serbia) fue uno de los motivos de su elección. Un hombre de la casa, con conocimiento sobre lo que es entrenar a Holanda, y además, siendo “alumno” del gran Rinus Michels, parecía contener los ingredientes necesarios para alcanzar la meta. Tras seis partidos oficiales, de los cuales ganó cinco y cayó derrotado en uno (vs Francia por 4-0), Holanda quedó tercera de su grupo tras Francia y Suecia, por lo que no pudo ni si quiera disputar la repesca.

Con respecto a los amistosos, el todavía seleccionador quiso destacar que se tratan de dos encuentros igual de importantes que otros, ya que “cada vez que un jugador se pone la camiseta de la selección, está moralmente obligado a respetarla y representarla como es debido, porque la historia nos muestra que muchos otros grandes jugadores la defendieron como nadie”, apuntó. Además, aprovechó para elogiar a los futbolistas convocados, ya que según él “me están dando las últimas alegrías al frente de la selección. Entrenar a la Selección holandesa es un privilegio muy grande, y poder compartirlo con jugadores tan jóvenes y con tantas ganas e ilusión es un verdadero placer”, concluyó Advocaat.