Morilla trabaja a puerta cerrada con la plantilla del Granada CF

El entrenador sevillano ha dirigido este jueves la segunda sesión al frente del equipo. Este viernes también entrenará sin presencia de la prensa.

Morilla trabaja a puerta cerrada con la plantilla del Granada CF
Pedro Morilla durante un entrenamiento [Foto: Pepe Villoslada / Granada CF]
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Por Redacción Granada VAVEL

La plantilla del Granada CF se ha ejercitado este jueves a puerta cerrada, en la segunda sesión de entrenamiento de Pedro Morilla al frente del equipo. El club ha informado de que la única ausencia en la sesión por lesión ha sido la del delantero Adrián Ramos. El colombiano sufre una "rotura miofascial del aductor mediano de la pierna derecha".

Además de Ramos, Pedro Morilla no puede contar esta semana en los entrenamientos con los dos jugadores que están concentrados con sus selecciones: Sergio Peña y Rey Manaj. Ambos son baja para el partido contra el Numancia, además de los sancionados Víctor Díaz y Darwin Machís.

La segunda sesión de entrenamiento de Pedro Morilla y su cuerpo técnico con el Granada CF ha comenzado con "un calentamiento y rondos", según ha informado el club. Posteriormente, los jugadores han realizado "trabajo de presión y partidos condicionados". 

El equipo granadino volverá a entrenar mañana viernes, también a puerta cerrada, a las 10:30 horas. Al finalizar la sesión, el entrenador Pedro Morilla comparecerá en la rueda de prensa previa al partido contra el Numancia, que se disputará el domingo, a las 20:30 horas, en el estadio Nuevo Los Cármenes. La plantilla también entrenará el sábado y será la última sesión antes de recibir al Numancia.

El hasta ahora entrenador del filial rojiblanco ya ha tomado las riendas de la primera plantilla para intentar reconducir la situación. Su buen hacer con los "chavales" le ha valido al sevillano la oportunidad de entrenar por primera vez en el fútbol profesional. En su debut, este domingo en el Nuevo Los Cármenes frente al CD Numancia, Pedro Morilla tendrá que hacer frente a la primera piedra que ninguno de sus antecesores en el cargo bajo el mandato del empresario chino Jiang Lizhang ha conseguido superar: estrenarse con victoria.