Esta tarde, sobre las 16:00 horas, se produjeron graves enfrentamientos entre ultras de Granada y Sevilla en los aledaños al Nuevo Estadio de Los Cármenes, cuando estaba previsto que la gente comenzara a acceder a la grada. Solo hay que lamentar dos heridos, además de algunos destrozos producidos en un bar cercano y en un coche estacionado en el lugar de los incidentes, propiedad de un aficionado procedente de Sevilla, según informó el Diario Ideal, siendo necesaria la intervención de la Policía Nacional para evitar mayores incidentes. Además, hubo presencia de radicales del Málaga y del Real Madrid, que ayudaron a incendiar los altercados.

Con 3.000 aficionados sevillistas en Granada, el Ministerio del Interior, que tachó este evento como "de alto riesgo", esperaba que hubiera incidentes, y por eso se desplegó un dispositivo de 85 agentes de la Unidad de Intervención Especial, además de un importante dispositivo de la Policía Local y Nacional. Afortunadamente, una vez intervenidos los altercados, no se volvieron a producir mayores incidentes, aunque no se descartan incidentes en la grada.