El resultado habla por sí solo. Pese a estar en pretemporada, el marcador refleja la superioridad vivida sobre el terreno de juego en el partido entre el Excelsior y el RCD Espanyol. Los de Quique Sánchez Flores vencieron por 0-3 gracias a los tantos de Óscar Duarte, Leo Baptistao y José Antonio Reyes. Y pudieron ser más debido a las innumerables ocasiones de las que gozaron los pericos en su último partido en tierras holandesas. El conjunto perico empieza a mostrar rasgos del técnico y de lo que se podrá ver durante la temporada: un equipo sólido y compacto, dominio de la posesión y juego alegre y al ataque

El partido dejó detalles claros como que Álvaro ha vuelto más enchufado de las vacaciones y es el dueño de la defensa, que Marc Roca va a contar con minutos a lo largo de la temporada y que Reyes y Baptistao se encargan del ataque y conectan muy bien pese haber disputado tan pocos minutos juntos.

Los pericos comenzaron enchufados el partido, creando una ocasión peligrosa de gol de las botas de Reyes. El Excelsior, que no quería dejarse intimidar, respondió rápidamente, pero sin suerte. Tras algún acercamiento y disparo alejado de la portería, el Espanyol consiguió adelantarse gracias a un córner lanzado por Reyes y que cabeceó al fondo de la red Óscar Duarte. Tan solo había transcurrido media hora de partido y la superioridad se plasmó en gol. Sin apenas tiempo de reaccionar, de nuevo Reyes en el papel que mejor sabe hacer, el de asistente, sirvió a Baptistao un balón que lo dejó solo ante el portero y consiguió el 0-2. Con el resultado de cara y realizando un partido muy completo, el Espanyol siguió a lo suyo, dominando y atacando y, excepto una ocasión de los locales, la primera parte solo tuvo un color: blanquiazul.

La segunda parte se inició de la misma manera que terminó la primera, con dominio de los jugadores de Quique Sánchez Flores. Reclamaron un penalti claro sobre Baptistao que el árbitro no señaló, pero no bajaron los brazos. A los 15 minutos de la segunda parte Reyes se hizo con un rechace al borde del área y con un disparo lejano batió al guardameta local. Este gol suponía el definitivo 0-3. A raíz del gol los pericos bajaron la intensidad del juego y llegaron algunas ocasiones por parte del Excelsior, pero sin crear demasiado peligro.

El último partido del RCD Espanyol en Holanda acabó con victoria para los blanquiazules, quienes además de conseguir victorias han dejado buenas sensaciones en cuanto al juego se refiere y han convencido a la afición, que les espera con ganas en Cornellà.