Resulta innegable reconocer que el filial del Real Valladolid está cuajando una sensacional temporada, como así lo atestiguan los números y su puesto de excepción en la tabla. Nada puede empañar la marcha de un combinado conformado para salvar la categoría y tratar de formar jugadores válidos para el primer equipo. Y es que la entidad se resiste a reconocer que la plantilla existente debe luchar por el playoff de ascenso a Segunda División. Aunque eso y las cifras cosechadas a domicilio.
El único 'pero' a esta fabulosa campaña del Real Valladolid Promesas aparece en los números cosechados lejos de los Anexos del Estadio José Zorrilla. Todo lo bueno registrado como local se despedaza cada vez que los pupilos de Rubén Albés tienen que salir de su feudo para medirse a otro rival. Quedó demostrado una vez más esta jornada pasada en su visita al Villa de Aranguren para enfrentarse al sorprendente UD Mutilvera. El cuadro navarro cuajó uno de sus mejores encuentros de la temporada y derrotó al conjunto blanquivioleta, que simplemente maquilló el resultado en los compases finales.
Cultural Leonesa, CD Boiro, Caudal Deportivo y UD Mutilvera pudieron con el Promesas a domicilio.
No es un caso aislado. El resultado ante la Mutilvera a domicilio supone la cuarta derrota consecutiva del Real Valladolid Promesas fuera de casa. Un dato y una cifra que complica, y mucho, las posibilidades de acometer la lucha por las cuatro primeras plazas para disputar el playoff de ascenso. Cultural y Deportiva Leonesa, CD Boiro y Caudal Deportivo fueron los equipos que consiguieron vencer con más comodidad de la esperada al segundo equipo blanquivioleta. Y es que los pupilos de Rubén Albés parecen mostrar dos caras totalmente diferentes de un campo a otro.
Lejos de su feudo, en los últimos cuatro enfrentamientos ha caído derrotado y solamente ha sido capaz de marcar un gol, por los once que ha encajado. Mientras, en los Anexos del Estadio José Zorrilla, el Real Valladolid Promesas suma diez de los últimos doce puestos en juego. En los cuatro enfrentamientos se ha encontrado con más dificultades de las previstas, pero ya suele ser habitual en estas segundas partes de competición. Con la permanencia en el bolsillo, la plantilla del filial blanquivioleta se resiste a dejar de soñar, aunque los números a domicilio lo impidan.