Fran Dorronsoro llegó a Lorca hace dos temporadas para cubrir el puesto de portero de un equipo que necesitaba encontrar a un guardameta de garantías en una travesía tan complicada como la que supone buscar el ascenso a Segunda División. El arquero cántabro ha formado parte de los años más especiales del club, viviendo la promoción al fútbol profesional y una temporada histórica en LaLiga 1|2|3 que no está saliendo como esperaban. Dorronsoro se ha convertido en uno de los grandes iconos de un equipo que ha sufrido grandes cambios en pocos años desde la llegada del empresario asiático Xu Genbao. Una referencia bajo palos que sigue escribiendo la joven historia de este club.

Aún quedan varios meses para que finalice la competición y aún tienen mucho que demostrar. Con la llegada de Fabri González y los mejorados resultados recientes, esperan poder dar una vuelta drástica a la situación del equipo y volver a engancharse en la lucha por la permanencia. Ha sido un cerrojo en la portería en los últimos partidos, donde ha comenzado a ganar más confianza con el nuevo sistema del técnico gallego. Tiene contrato hasta el 30 de junio, aunque muchos desean que su futuro esté en la Ciudad del Sol. El Lorca FC y Dorronsoro recibieron a VAVEL en el Artés Carrasco para realizar una pequeña entrevista.

Pregunta. Esta es su segunda temporada en Lorca. ¿Cuáles fueron sus primeras impresiones de la ciudad y del equipo cuando llegó?

Respuesta. Fueron buenas, tenía a varios compañeros que habían trabajado aquí y me habían comentado como se trabaja aquí. Sabía que eran un proyecto bueno y decidí apostar por él y todo salió bien, conseguimos el objetivo que era el ascenso.

P. ¿Cómo definiría que está siendo su paso por el club en estos dos años?

R. Bueno, la verdad es que ahora está siendo complicado por la situación en la que estamos, pero en lo deportivo y profesional estoy muy a gusto. Mi familia está muy bien aquí y creo que es positivo a pesar de la situación que vivimos ahora.

P. Esta temporada han pasado dos entrenadores por el banquillo del Lorca: Curro Torres y ahora Fabri es el que se encarga de manejar la plantilla. ¿Con qué se queda de cada uno de ellos?

R. De Curro me quedo con la pasión que le ponía. Al tener tan cerca el hecho de haber sido jugador, sabía muy bien lo que pensábamos en cada momento los jugadores, era muy cercano con todos nosotros. De Fabri me quedo con la experiencia que tiene en los banquillos, aprendemos mucho con él.

P. ¿Cómo se vive con la presión de tener que mantener la portería a cero cada fin de semana?

R. Ya estoy acostumbrado. Este año está costando más de lo debido pero siempre se intenta el tener que encajar goles. Un portero ya sabe qué es lo que hay cada fin de semana, hay que intentar que no te hagan gol y bueno, se lleva como se puede.

P. Muchos jugadores que empezaron la temporada en el Lorca salieron en el mercado invernal de fichajes. ¿Es duro ver a tantos compañeros salir del equipo cuando los resultados no terminan de acompañar?

R. Da pena porque el vestuario fue una clave del ascenso del año pasado. Había una grandísima unión entre nosotros y al final te da pena. Pero cada temporada pasa lo mismo y quieras o no te vas acostumbrando a vivir este tipo de situaciones. La mayoría se ha ido a equipos que están cerca como el UCAM o el Real Murcia y podemos seguir en contacto con ellos.

P. Para paliar esas bajas llegaron nuevos jugadores en el mercado de invierno. ¿Cómo está viendo la adaptación de todos ellos al equipo?

R. Se están adaptando bien. En este vestuario, al respirarse tan buen ambiente se hace muy fácil para la gente nueva. Nosotros también tratamos de ponérselo todo muy sencillo para que se involucren y estén a gusto cuanto antes. Tenemos que remar todos en la misma dirección que es lo principal para conseguir el objetivo.

P. ¿Cuál es su mejor recuerdo hasta ahora como jugador del Lorca?

R. Sin ninguna duda, el ascenso que conseguimos contra el Albacete.

P. ¿Y algún partido que recuerde con especial cariño?

R. Pues esa final contra el Albacete aquí en casa. Fue un partido muy especial, se llenó el campo por primera vez en su historia y también por decir pues el debut con el Lorca en Segunda. Ese partido contra la Cultural Leonesa que arrancamos la competición con victoria, diría esos dos.

P. Por lo general, los niños siempre quieren ser delanteros y marcar muchos goles, ¿qué es lo que le llevó a elegir ser portero?

R. Yo también empecé de jugador hasta una edad bastante larga. Luego un día decidí cambiar, no sé realmente por qué y hasta aquí hemos llegado. La verdad es que cualquiera siendo niño quiere meter goles, portero no quiere ser nadie. Con 14 o 15 años elegí ser portero y estoy muy contento de haber tomado ese camino.

P. Le hemos visto parar ya dos penaltis esta temporada. ¿Cómo se siente un portero cuando consigue detener un disparo desde los once metros?

R. Se siente bien, suele ser acierto, intuición… Cuando un penalti se falla se suele decir que es error del jugador y no acierto del portero. Pero creo que hoy en día ya existen porteros que tienen esa virtud de parar penaltis. Te sientes bien, lógicamente, son situaciones de partido en las que no tienes nada que perder, y si lo paras te sientes, como se suele decir, el héroe.

P. ¿Alguna manía que tenga antes de los partidos?

R. Simplemente entro con el pie derecho, me santiguo y beso el nombre de mi hija que llevo tatuado en el brazo.

P. ¿Cómo es Fran Dorronsoro lejos del fútbol, qué le gusta hacer en el tiempo libre?

R. Me gusta estar rodeado de mis amigos, de mi familia, de mi mujer y de mi hija. Tengo una vida tranquila y ordenada. Al tener una hija tengo que cumplir siempre sus horarios.

P. Por último, ¿algún mensaje que quiera dar a la afición del Lorca?

R. Simplemente decir que pase lo que pase, este equipo no va a bajar los brazos y si tiene que morir lo hará con las botas puestas.