Aparte de jugadores que acaban contrato como Pau López o Inui, el Betis también trabaja opciones de mayor envergadura económica. Una de ellas sería la de Sander Berge.
Con tan solo 20 años, Berge era un fijo en las alineaciones, siendo titular en todos los partidos de liga hasta octubre del año pasado, cuando se lesionó ante el Brujas. El mediocentro lleva sonando desde el verano pasado con fuerza en la agenda sevillista, y desde Bélgica se llegó a anunciar un posible pre acuerdo existente entre ambos que posteriormente fue negado por el entorno del futbolista.
El precio de salida del jugador superaría los diez millones de euros, ya en verano del año pasado el Genk rechazó ofertas de hasta doce millones por él. El jugador sin embargo no se ha revalorizado debido a la lesión que lo mantiene alejado de los terrenos de juego desde hace casi cinco meses. Fue fichado hace un año por dos millones de euros, proveniente del Valerenga noruego y sus buenas actuaciones en Bélgica le han puesto en el punto de mira de Betis y Sevilla.
Desde el club plantean realizar una importante inversión por Berge, sabedores de la posibilidad de sacar una gran plusvalía con una venta futura si el jugador cumpliese con las expectativas en una liga de más nivel como la española. Desde la dirección deportiva se plantean vender un porcentaje de una futura venta a su club de origen con la idea de abaratar el precio del futbolista.
Berge supondría el desembolso más alto en la era de Serra Ferrer al mando de la dirección deportiva, superando los diez millones de Bartra del pasado mercado invernal o los siete que costó en verano Ryad Boudebouz.
Como ya pasara recientemente con el mediocentro argelino bético, Nolito o Layún, todo apunta a que habrá otro derbi en el mercado, esta vez por la joven promesa del fútbol noruego.